Bermeo - Ha llovido mucho desde la primera vez que un paso recorrió las calles de la villa bermeana en Semana Santa. De hecho, la asociación Santa Vera Cruz lleva encargándose de la organización de las procesiones desde el año 1550. Por lo tanto, durante más de 450 años de historia decenas de personas han participado en esta tradición con algún santo que otro a cuestas.

Aunque el número de gente que organiza dichas procesiones haya descendido considerablemente, esta tradición de Semana Santa es considerada como una de las más importantes en Bizkaia. Es por ello que la asociación lucha año tras año para que dicha costumbre de enorme valor histórico se mantenga viva.

“Las procesiones en Bermeo se llevan celebrando desde 1550, por consiguiente, es importante que la gente se anime a organizarlos”, afirman los hermanos Xabier y Urko Arostegi, nuevos director y representante de la asociación Santa Vera Cruz. Ambos han revisado los estatutos con el fin de amoldarlos a la presente legislatura.

Años de historia Tal y como han recordado los hermanos Arostegi, “las procesiones de Bermeo son de las más antiguas de Bizkaia y Euskal Herria, y las únicas que se celebran en los municipios adyacentes”. De hecho, los pueblos más cercanos que sacan sus pasos a la calle son Lekeitio, Durango y Bilbao. Es por eso, que son muchos asiduos de los pueblos de alrededor los que se acercan a la villa para disfrutar de esta tradición.

Sin embargo, a medida que pasan los años son menos los vecinos que se interesan por este tipo de festividades. Con lo cual, desde la asociación hacen un llamamiento para que gente voluntaria se anime a participar en la organización de esta costumbre. “Hace falta mucha gente, no solo para llevar los santos, sino también para vestirlos, o incluso para preparar las flores”, recalcan los hermanos Arostegi.

El llamamiento para colaborar en la organización de dichas procesiones y realizar diferentes tareas va dirigido a gente de todas las edades y sin ánimo de lucro. Todos aquellos que quieran participar deben llamar y apuntarse en el teléfono 662 37 7758.

“Necesitamos que los vecinos ayuden en mantener viva esta tradición que lleva en auge más de 450 años”, afirman. Además, recuerdan que las procesiones atraen gente que puede dejar dinero en el pueblo.