Gordexola - En pleno debate sobre la longitud de los resaltos circulatorios y sus efectos en la salud, Gordexola vuelve a discutir cómo atajar el problema del exceso de velocidad. Esta vez se ha recurrido a los radares móviles como elemento disuasorio para los conductores, en especial en la carretera que conecta con Artziniega y Sodupe. “Nos parecía bien avisar a la ciudadanía”, explican desde el equipo de gobierno sobre el bando que se ha difundido para informar de esta medida.

“De vez en cuando solicitamos orientación a la Ertzaintza porque seguimos advirtiendo que los vehículos pasan a una velocidad mayor de la debida y no es la primera vez que nos aconsejan colocar radares móviles”, detallan. En esta ocasión, las incidencias afectan mayoritariamente a los barrios de Zaldu e Ira-tzagorria.

Entre tanto, el Ayuntamiento de Gordexola continúa a la expectativa de conocer cómo se concretará la inversión de 100.000 euros por parte del Gobierno vasco para actuar en relación a los resaltos. “Esta corporación entiende el malestar con respecto a los resaltos -que, por otra parte, son medidas habituales en todos los municipios de Euskadi- pero la discusión no nos la planteamos en la disyuntiva “resaltos si resaltos no, sino que ponemos sobre la mesa una actuación integral”, subrayan. Por ello, si se pretenden abordar estas necesidades, “100.000 euros es una cantidad insuficiente para desarrollar la totalidad de las posibles actuaciones garanticen de forma efectiva la seguridad vial en el municipio”. Por ejemplo, crear vías alternativas para peatones o ciclistas o adecuar las paradas de autobús”. - E. Castresana