elorrio- El hecho de que estas navidades la antigua moneda haya vuelto al municipio de Elorrio le ha convertido en el gran protagonista de los últimos días. Y es que el abadiñarra Javier Usabel Txipi, residente en la villa toda su vida, guarda en su lonja más de mil kilos de pesetas. “Me dio por ahí y fue hace cuarenta años cuando empecé a guardarlas. A día de hoy tengo más de una tonelada de pesetas. Recuerdo cómo el panadero y diferentes amigos comenzaron a pasármelas y con el tiempo logré llenar varios bidones. Calculo que tendré alrededor de unas 285.000 pesetas lo que al cambio son unos 1.500 euros”, explicó el jubilado, mientras mostraba las miles de monedas que caducaron en 2002.

Fue a raíz de la novedosa campaña puesta en marcha por la asociación de comerciantes de Elorrio (EME), en colaboración con la Sociedad Filatélica y Numismática de la villa, cuando a Txipi le preguntaron por sus antiguas rubias. “La verdad que me han llamado desde bastantes medios de comunicación y no se cómo se han enterado de la noticia porque solo varios amigos conocían mi colección y ellos no han dicho nada”, reconoció un tanto sorprendido por el revuelo.

Reconociendo que “ya las tenía casi olvidadas”, el coleccionista, además de los miles de pesetas amontonadas en bidones, también guarda con cariño un gran arcón donde clasifica en dosificadores algunas de las monedas más antiguas -de 1944, con la cara de Franco-, las más recientes -de 1975 con la cara del rey Juan Carlos- y otras pesetas de aluminio, céntimos plateados y otros efectivos.

Con el objetivo de fomentar el comercio local, la campaña dio inicio el día 1 y se alargará hasta el 31 de enero. Así, los clientes podrán abonar sus compras en los comercios de la asociación en pesetas, siendo admitidos como medio de pago tanto las monedas como los billetes, al cambio oficialmente establecido (1 euro/166,386 pesetas). Según datos facilitados recientemente, todavía quedan en el Estado unos 1.600 millones de euros en pesetas que no se han cambiado: 842 millones en billetes y 799 en monedas, lo que supone una media de unos 34 euros por habitante.

Teniendo en cuenta que el período de cambio de billetes y monedas de pesetas a euros en el Banco de España finalizará el 31 de diciembre de 2020, Txipi no se ha interesado por el valor que podrían alcanzar sus monedas en el mercado del coleccionismo y ha descartado la posibilidad de utilizar sus pesetas en la campaña para dinamizar las compras locales. “Si saco todas las pesetas al hombro me pueden meter en la cárcel”, apuntó entre risas.

En lo que a la posibilidad de poder canjear sus pesetas por euros se refiere, Txipi tiene claro que “después de tanto tiempo recogiéndolas ahora no las voy a cambiar a euros”. En otro orden de cosas, el coleccionista reconoció que “estuve pensando en hacer un busto con las monedas pero no me atreví por el problema que puede suponer fundir dinero”.

En la actualidad, son muchos los que añoran la peseta y piensan que la puesta en marcha del euro provocó una subida importante de los precios. Preguntado por este debate que revive con frecuencia, Txipi aseguró que “me da igual una cosa que otra porque las cosas hay que pagarlas igual”.

Otros objetos antiguos Además de coleccionar pesetas, Txipi, aficionado a la talla de madera desde hace cuatro décadas, cuenta con una lonja en la que almacena todas sus obras. Así, a sus 70 años, ha creado un museo personal donde también guarda numerosos objetos antiguos que le han regalado durante todos estos años, como maquinas de coser o radios. “Me gusta coleccionar cosas antiguas y son muchas las personas que me han ayudado todos estos años”, zanjó agradecido.