Portugalete - Pese a los sentimientos que desprende, lo cierto es que en un cementerio también brota el arte, y tiene la capacidad de contar la historia. Aquello que ha ocurrido muchas generaciones atrás. Muestra de ello es el camposanto de Portugalete, equipamiento de 140 años de antigüedad, al que hará protagonista la nueva edición de la publicación Tesoros Portugalujos.
Esta revista pondrá en valor el bagaje patrimonial e histórico del camposanto jarrillero, construido en 1877. La décima entrega de Tesoros Portugalujos ha estado creada por el historiador Koldo Somokueto y cuenta con fotografías cedidas por la Fundación El Abra, Euskomedia y el propio Koldo Somokueto. Esta publicación es fruto del convenio suscrito en 1994 por el Ayuntamiento de Portugalete con Eusko Ikaskuntza para promocionar y fomentar la cultura vasca y el patrimonio.
En este sentido, el cementerio jarrillero tiene mucha historia que contar y es muestra de muchos periodos históricos. Entre sus instalaciones se encuentran panteones de familias tan poderosas e importantes como los Chávarri y los Gandarías. Precisamente, gran parte del patrimonio arquitectónico del camposanto se desprende de estos panteones que marcan una clara diferencia con los humildes nichos y enterramientos de la clase obrera. En este camposanto también existen evidencias de que hubo un cementerio civil que, hasta 1932 estaba separado por una tapia respecto a los enterramientos religiosos.
Todos esos detalles y otras muchas historias que se han ido originando a lo largo de los 140 años de vida del cementerio de Portugalete son los que se narran en Tesoros Portugalujos. Esta publicación cuenta con una tirada de un millar de ejemplares y ya se pueden lograr en Santa Clara y en la biblioteca municipal. - M. A. Pardo