El lunes empezaron a trabajar en Zalla las dos mesas de las que saldrán acciones concretas para lanzar el plan de estímulo que la Diputación propuso a los alcaldes y la presidenta de la Mancomunidad y que se implantará en enero de 2018. En estas semanas trascendentales más que nunca, la comarca está decidida a llevar la voz cantante de su reinvención. Enkarterri quiere adaptarse a los cambios que se avecinan y crear oportundades con voluntad, ilusión y confianza en una de las principales fortalezas del territorio, precisamente la que se premió ayer en el Klaret Antzokia durante la gala de entrega de los Laboral Kutxa DEIA Hemendik sariak: “Un capital humano de primer nivel”, ensalzó el alcalde de Balmaseda, Álvaro Parro.
Asociaciones culturales o deportivas que “escriben las historias de proximidad que aparecen en las páginas de Hemendik, tan importantes aunque queden ocultas tras los grandes acontecimientos, y más en días como hoy”, decía el director adjunto de DEIA, Enrique Santarén, en referencia a las noticias que llegaban desde el Parlament catalán. Eider e Igor Merino comparten la determinación de luchar para alcanzar sus metas a base de esfuerzo. En el mismo lugar donde se casaron sus padres, ya que el Klaret Antzokia antes fue iglesia, los hermanos ciclistas de Balmaseda recibieron el Bizkaia saria, que recogió Eider de manos del diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria. La pintora Teresa Ahedo se mostró exultante al agradecer su Omenaldi saria con un alegato por la igualdad, necesario, ya que “se está produciendo una masacre contra los derechos de la mujer en todo el mundo”. Conmovidos por la ovación con la que el público honró la memoria del espeleólogo José Antonio Gambino, su hermano, Víctor e Iñaki González, de la Sociedad de Espeleología Burnia de Galdames, destacaron “con el sabor agridulce que da el hecho de que se trate de un reconocimiento póstumo”, una personalidad “sencilla y tenaz, con valores de premio”.
La coral Atxaspe de Sopuerta, que comparte año de nacimiento con DEIA, celebrará su cuarenta aniversario en la Casa de Juntas de Abellaneda. De ese mismo lugar nace la ruta de las ferrerías que “el 29 de octubre”, avanzó el director del Museo de las Encartaciones, Javier Barrio, recorrerá el patrimonio del río Barbadun, recientemente obtenía calificación de Bien Cultural por parte del Gobierno vasco. Lo hará con energías renovadas, como comienzan el curso el grupo de Gaztetxos de Gordexola, Muxarra Taldea y los niños que visitan Bizkaia Park Abentura. Y sin descuidar los estudios, siguiendo el ejemplo de Iván Espilla, el joven de Turtzioz estudiante en el IES Balmaseda que se proclamó campeón de Euskadi de matemáticas, y de los alumnos de la ikastola Zubi Zaharra de Balmaseda. Ganeko Jai Elkartea y el Kolektibo Bakalao trasladaron al Klaret el sabor de las fiestas, mientras que el Grupo de Misiones de la Parroquia de San Severino y la asociación 8-N de Zalla impregnaron el auditorio de solidaridad. Todos lanzan la pelota, al igual que el club de baloncesto de Balmaseda, con la idea de encestar por construir una Enkarterri cohesionada, que mire al futuro con esperanza. Lo comparten Elena Unzueta, Imanol Pradales, Esther Lasa, Tomás Olarte, José Ramón Taranco, Josu Montalban y Raúl Palacio, así como Kike Hermosilla, Josu Molinos, Idoia Gutiérrez, Iñigo Aspiunza y Joana Pérez, en representación de DEIA.