TODOS los hombres son dioses para su perro. Por eso hay gente que ama más a sus perros que a los hombres. Es una verdad como un templo, sin que a veces el propietario de uno de ellos no caiga en la cuenta lo poco que importa lo elocuente que ladre un perro; nunca podrá decirte que sus padres fueron pobres pero honestos, tal y como dijo Bertrand Russell. Más allá de esa forma desmesurada de amor y de cariño, que en ocasiones también se da entre dos seres humanos, hay hombres y mujeres que vuelcan sus afanes y desvelos sobre los animales, tanto propios como ajenos. Son los veterinarios, un oficio de mucha ciencia por mucho que Louis Pasteur advirtiese que los veterinarios lo tienen más fácil porque no son desorientados por las opiniones de sus pacientes.

Bien pudiera habérselo preguntado a Álvaro Mateos, presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Bizkaia, que ayer presentó sus nuevas instalaciones, en el 53 de Alameda Mazarredo, en un acto inaugural que atrajo a una nutrida representación de la sanidad vizcaina, de la agricultura y ganadería de estas tierras. No lo hizo porque el hombre andaba ocupado entre bienvenidas dadas y parabienes recibidos.

Junto a él, no faltaron los miembros de la junta que preside Mikel Solano, José Treviño, Argizka Etxebarria, Joana de Santiago, Jon Ander Barrenetxea, Egoitz Bikandi y Xabier Arbeloa; Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria; Ikerne Zuluaga, directora de Agricultura y Ganadería; la diputada foral Elena Unzueta, la subdelegada del Gobierno, Covadonga Aldamiz-Echevarria; el presidente de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao, Ricardo Franco Vicario; el secretario del Colegio de Enfermería de Bizkaia, Ignacio González; la presidenta del Colegio de Farmacéuticos, Elena Castiella; el vicepresidente del Colegio de Ópticos, Iñaki Elías; Francisco Dehesa, Enrique Jorge, Juan José Badiola, presidente del Consejo, quien departía con José María Aurrekoetxea, precursor de las clínicas de pequeños animales, el embrión del oficio a pie de calle; Juan Goiria, Maite Feito, José Luis Mata, Michel Martínez, Mariano Gómez, Enrique Thate, Álvaro Díaz, Juan Orduna, María García, Rafael Rollán, jefe de Dependencia de Agricultura y Pesca de la Subdelegación del Gobierno en Bizkaia; políticos de la talla de Luis Eguíluz, Carmen Muñoz y Shamir Ladou; Iñaki Arrazola, Virginia Larrea, Ana Tejada, Luis María Urquidi, Joseba Garrido, Julen Larrinaga, Mirari Petralanda, Alberto Igeregi y toda una legión de hombres y mujeres que sienten un compromiso fuerte con los animales, que tienden puentes invisibles entre las diversas especies que habitan la tierra.

Todos ellos elogiaron las nuevas instalaciones del Colegio y abogaron por que una sociedad avanzada como la nuestra mantenga la fe en que la convivencia con ellos, los animales, es fruto del cariño mutuo.