El asfaltado de la pista impedirá ampliar el horario del aeropuerto de Loiu
Los aviones no podrán aterrizar más allá de las 23.30 horas, ya que la obra solo se puede ejecutar de madrugada
Loiu - Un total de 12 compañías en solitario o grupos de empresas se han presentado a las obras de reasfaltado de la pista principal del aeropuerto de Bilbao, el que va a ser el tajo de mayor cuantía económica desde la inauguración de la terminal en 2000.
Un proyecto que Aena, el gestor de aeropuertos del Estado, ha licitado por un montante de casi diez millones de euros y que marcará la operativa aérea ya que se tendrán que ejecutar de noche y limitará el tiempo de aterrizajes y despegues.
Esto significa que las operaciones de los aviones no se podrán ampliar a la madrugada. Aena ha previsto en las condiciones del contrato que adjudicará en breve que de marzo a mayo del próximo año (la mejor época climática para estos trabajos) el aeropuerto no ofrezca a las aerolíneas la opción de aterrizar más allá del horario operativo, un plazo entre las 23.30 y 1.00 horas que se conoce en el argot aeronáutico como PPR o servicio de petición de ampliación horaria.
Un problema, ya que en esa época, con la Semana Santa como días álgidos, las compañías solicitan a menudo permiso para aterrizar en PPR como consecuencia de la suma de retrasos que acumulan a lo largo de la jornada. Una petición que cuesta dinero a las aerolíneas, pero menos que el importe que significa el desvío del vuelo a otro aeropuerto cercano o la cancelación del mismo. En el trimestre referido de ejercicios anteriores la media de vuelos que han operado fuera de horario habitual ha sido de medio centenar.
Fuentes del Aeropuerto de Bilbao han razonado la medida en que “se tiene que tener el máximo de horquilla de tiempo nocturno para trabajar en la pista”.
Otro hándicap que tendrá el recrecimiento de la capa de rodadura es que solo se podrá trabajar con tiempo seco. La lluvia impide la extensión segura del pavimento, de ahí que el plazo de ejecución se haya previsto de seis meses y dar margen a la contrata para acometer el proceso.
Un proyecto que se ha licitado por 9,8 millones para reasfaltar los 2,6 kilómetros de longitud de la pista, los cuales se ejecutarán en pequeños tramos a lo ancho del pasillo de operaciones para permitir que los aviones sigan aterrizando y despegando durante el día. También se aprovechará para renovar todas las balizas de posicionamiento incrustadas en el pavimento.
Una nueva rotonda viaria Pero antes de que el proceso de asfaltado afecte la pista principal, las máquinas pesadas estarán ya presentes este año en el aeropuerto.
Aena sacó a concurso la semana pasada la construcción de una nueva rotonda viaria para facilitar el paso de furgonetas y camiones a la zona industrial del aeropuerto, su principal tráfico. La licitación abierta prevé la construcción de un nudo viario en terrenos del aeropuerto que se integrará con la carretera de acceso a la terminal, la N-633, que todos los viajeros y acompañantes utilizan a diario, aunque estos no serán los principales beneficiarios.
La rotonda permitirá a los transportistas que cada día se desplazan a la zona industrial aeroportuaria evitar el largo recorrido que efectúan en la actualidad. En concreto, estos profesionales ahora llegan por la carretera general hasta la terminal, pasan por delante de ella y vuelven a tomar la carretera N-633 en sentido contrario para entrar en la zona de pabellones industriales. Con la rotonda terminada, el recorrido se evita al entrar directamente a su zona de trabajo.
La licitación prevé un gasto máximo de 1,7 millones y un tiempo de ejecución de siete meses. Según fuentes aeroportuarias, una vez entre en servicio la rotonda se mantendrá el tránsito prioritario del tráfico hacia y desde la terminal.