Barakaldo - La tarjeta de residentes de la OTA de Barakaldo será gratuita a partir del 1 de enero de 2017. Esta medida se recoge en el proyecto de tasas que presentó ayer el equipo de gobierno de la localidad fabril. Esta no será la única modificación que se realice en el servicio de OTA, ya que, dentro del boceto de tasas para el próximo ejercicio que ya ha entregado a los grupos de la oposición, el equipo de gobierno encabezado por la alcaldesa Amaia del Campo incluye una tarificación especial para los comerciantes, quienes pagarán 1,25 euros al día por aparcar, y la creación de una nueva zona marrón con el objetivo de descongestionar de vehículos el centro del municipio. El precio del estacionamiento en esta zona será de un euro si se estaciona durante media jornada y de 1,50 euros si se aparca todo el día.

La gratuidad de la tarjeta para residentes entrará en vigor el próximo 1 de enero, pero tanto la tarifa reducida para comerciantes como la implantación de la zona marrón deberán esperar a la materialización de otros trámites tras la presentación del nuevo proyecto de tasas municipales. Esas modificaciones son los cambios dentro de la ordenanza de tráfico y la firma de un nuevo contrato para la gestión de este servicio. “El primer paso ya está dado, y el nuevo modelo de OTA en Barakaldo está cada vez más cerca. Estamos trabajando en los otros dos conceptos y, tal y como anunciamos, el nuevo modelo llegará a lo largo de 2017”, declaró Amaia del Campo, alcaldesa de Barakaldo.

IBI para familias Además de la gratuidad de la tarjeta para residentes, las tasas municipales -de aprobarse la propuesta realizada por el equipo de gobierno-, otra de las partes más importantes de las tasas municipales será el Impuesto Sobre Bienes Inmuebles (IBI). El Consistorio fabril, tras la actualización catastral realizada por la Diputación de Bizkaia, ha buscado que las familias comerciantes y hosteleros del municipio paguen una cantidad “lo más parecida” a la actual. Así, a estos colectivos se les aplicará un tipo del 0,3, la parte más baja dentro de la orquilla impositiva diseñada por el ente foral.

“Los Ayuntamientos no podemos decidir el valor catastral, pero a la hora de cobrar el IBI podemos movernos entre una horquilla de porcentajes que establece la propia Diputación. Lo que hemos hecho ha sido buscar el porcentaje que suponga menor cambio para las y los vecinos”, subrayó Del Campo.

Quienes sí serán gravados con un tipo mayor serán las grandes industrias y comercios, además de las viviendas vacías. En el caso de estas últimas, el incremento medio del importe de este impuesto será del 40%, mientras que a la industria se le aplicará un tipo de 1,1 que ascenderá al 1,5 en el caso de que su valor catastral supere los 350.000 euros. Asimismo, a las medianas o grandes empresas se les aplicará un tipo de 0,5, mientras que en el caso de las grandes superficies comerciales, este valor en el IBI de 2017 ascenderá al 0,98.