LA nueva forma de reciclar se llama upcycling. Surgió de una idea recogida por primera vez en 2003 en el libro Cradle to Cradle, Remarking the Way We Make Thing, en el que los autores, Michael Braungart y William McDonald, aseguran que el sistema de reciclaje actual solamente es un “infrarreciclaje”, ya que consideran que solo consigue ralentizar el ciclo destructivo. Por ello, buscaron la solución para evitar esa devastación: juntar piezas en desuso para convertirlas en un objeto totalmente nuevo y con una utilización diferente.
Para Koopera, una cooperativa con filosofía de innovación social y ambiental, esa reflexión sirvió de inspiración para crear una línea upcycling propia. Y es que entre sus áreas de actuación se encuentra la recogida de ropa y artículos en desuso a través de contenedores. Una parte de lo recogido se vende porque está en buen estado, lo demás se recicla. De las 15.166 toneladas recaudadas el año pasado, el 60,5% sirvió para reutilización y el restante 30,7% para reciclaje. Por ello, sintieron que parte de la ropa destinada al reciclaje, debía unirse a esta forma de recuperación “en estado puro”.
Entre sus diseños se pueden encontrar combinaciones de piezas de artículos que prácticamente todo ciudadano tiene en casa, pero con segundos usos totalmente inusuales.
Así, se pueden encontrar neumáticos a los que añadidas las patas de una mesa, sirven de maceta para plantas; ruedas de un skate que se ha quedado viejo, como perchero para colgar chaquetas, o camisas rotas, que ya no sirven para usarlas, pero que con un poco de imaginación se pueden convertir en un bonito vestido.
Con un nivel de dificultad para su elaboración algo mayor, también se encuentran cámaras fotográficas compactas, a las que metiéndole su debido circuito eléctrico, se les puede dar uso como bombilla; maletas con patas que sirven de asiento; sofás construidos con palés y viejas colchas, o vinilos, que con su adecuada maquinaria se convierten en reloj de pared.
Todas estos diseños creativos se encuentran a la venta en la página web de Etsi Upcycling, ya que tal y como explica Nagore Pérez, técnica de Comunicación de Koopera, no querían publicarlo en su web oficial “porque nos queríamos mezclar ideas, ya que es una línea totalmente diferente y especial”. Aunque, adelanta a DEIA que prevén abrir página propia y tienda física próximamente.
Asimismo, Pérez también explica que la cooperativa aprovecha la nueva línea para crear empleo, lo cual es el objetivo principal de la empresa. Relata que “una persona cualificada crea los diseños upcycling, y después personas de talleres de inserción socio-laboral de Cáritas las llevan a cabo con su ayuda”, gracias a lo cual generan más recursos para la gente en riesgo de exclusión. Además, para ser fieles también a otro de sus principios, todos los procesos y materiales que utilizan son respetuosos con el medio ambiente y apoyan el consumo sostenible.