La solidaridad hizo cumbre en el pico Mello

LA silla de ruedas de Iker Marrón Garrido, un joven muskiztarra de 13 años afectado por una enfermedad degenerativa, que postra su menudo cuerpo pero no su enorme espíritu de superación, parecía ayer un encabritado Subaru encarando las empinadas cuestas que enfilan el ascenso al Monte Mello, el símbolo montañero de su pueblo, convertido ayer en buzón solidario a favor de los enfermos vizcainos de espina bífida e hidrocefalia.

“Ha sido duro” reconocía este reputado conductor de coches de scalextric que a bordo de su bólido y apoyado por numerosos montañeros llegados de diferentes clubs de Ezkerraldea y Enkarterri cumbreó la mole granítica junto con los cerca de 300 corredores que ayer tomaron parte en la jornada final del Mello Trail Non Stop. Esta iniciativa solidaria, ideado por un grupo de amantes del deporte de montaña que han logrado movilizar a cerca de 500 personas, tuvo un novedoso componente en la carrera nocturna del viernes -con la lluvia y el frío haciendo de las suyas- en la que tomaron parte 54 intrépidos corredores.

“Sin duda han sido unas jornadas plagadas de emoción en las que es difícil explicarlo con palabras”, reseñaba Iñaki Marrón, padre de Iker, que ayer, junto a su mujer Aran-tza y sus otros dos vástagos, -Inhar, de 10 años e Izei de apenas 10 meses, al que portó en una mochila-, acompañaron a Iker en su aventura montañera en favor de la asociación Asebi.

400 asociados “Para nosotros ha sido una enorme satisfacción ver la respuesta del pueblo de Muskiz en favor de estos enfermos y no podemos más que mostrar nuestro agradecimiento”, señalaba una portavoz de esta asociación que en la actualidad cuenta con cerca de 400 socios y que tiene en el acompañamiento psicológico a enfermos y familiares y en la ayuda económica a los afectados el epicentro de su actividad.

“Hay que tener en cuenta que las afecciones que genera esta enfermedad exigen fuertes gastos en elementos de movilidad, ortopedia y tratamientos médicos”, explican desde la asociación que ayer estuvo presente en la plaza Meatzari -punto de inicio y llegada de la prueba atlética- con una mesa informativa y talleres para los más pequeños.

A falta de conocer el resultado de la recaudación obtenida con esta iniciativa -cuestión que se resolverá en el marco del encuentro de deportistas aficionados que se celebrará el 23 de abril en Muskiz- los organizadores de la prueba Trail Non Stop no competitiva quisieron destacar el importante papel que han jugado las diferentes empresas patrocinadoras, especialmente “el gran trabajo que han desarrollado en estas tres jornadas los miembros del cuerpo de protección civil de Muskiz. Para ellos también han sido tres días Non Stop”.

La jornada incluyó el sorteo de varios regalos entre los que destacaba una camiseta con las firmas de los integrantes de la selección vasca de fútbol, aunque el mejor premio lo cosechó la familia de Iker que agradeció la solidaridad de los deportistas. Además, Iker se llevó una agradable sorpresa durante la posterior comida de hermandad cuando los miembros de Mello Trail taldea le regalaron un camión para su excalextric y una camiseta de otro gran Iker, Muniain.