Bilbao - Las obras en marcha se acometen tras la machacona realidad de las estadísticas y de las retenciones diarias en la hora punta de la mañana. La cada vez mayor extensión del Parque Tecnológico de Bizkaia, la ampliación de los polígonos industriales y también el aumento de pasajeros en el aeropuerto de Bilbao, sobre todo que toman los primeros aviones de la mañana en dirección a Madrid, Barcelona y Europa ha dibujado un escenario de retenciones que, lejos de disminuir, han aumentado en los últimos años.
Los estudios forales demuestran que los vehículos que continúan por el corredor de Txorierri y los que se dirigen en sentido Mungia, son los mismos, unos 16.000 conductores de media a lo largo del día.
Unos caudales admisibles con un tráfico normalizado pero que se desbordan entre las siete y la nueve de la mañana. A esa hora todo el tráfico que llega por el corredor de Txorierri procedente de Bilbao, Ezkerraldea y Uribe Kosta, unos 2.400 vehículos siguen hacia Erletxes y otros 2.200 vehículos toman el ramal a Mungia.
Esto se traduce en que en el primer caso sobra capacidad, y en el segundo, al disponer de solo un carril, se generan atascos que afectan al resto del corredor de Txorierri. Las colas llegan hasta dos kilómetros de largo, ya que los coches empiezan a colocarse desde esa distancia para asegurarse la salida sin generar ocupaciones del carril central. Unas retenciones que prosiguen por el itinerario de tres kilómetros descritos.
Con toda esta intensidad de tráfico, las cifras indican que al llegar a la salida de Derio hacia la derecha, hacia la BI-737, el reparto a lo largo de un día medio es aproximadamente de 20.000 vehículos de paso en dirección a Mungia y el aeropuerto y 10.000 por la salida mencionada.
Sin embargo, en la hora punta, la distribución se invierte y es favorable al ramal de salida, que se lleva el 55% de los 30.000 vehículos, por eso “también se producen algunas retenciones, aunque menores que en Txorierri”, indica el informe técnico.
Abandonado el corredor hacia Mungia, el tráfico de salida continúa hacia la glorieta de la BI-737, punto donde la mayor parte del tráfico toma la misma dirección hacia el parque tecnológico y los polígonos del valle. Por ello es necesario añadir un carril más al actual enlace y entre las dos rotondas previas a la carretera que conecta con el parque.
En ese punto, en hora punta, la mitad del tráfico sigue por la BI-737, en dirección a Lezama, y la otra mitad va hacia la zona de pabellones empresariales de Zamudio.
Los técnicos prevén que al solucionar el atasco en Txorierri con las obras por acometer, se vaya a generar en este punto “una demanda ahora oculta por el anterior, agravándose el problema de colas”. - A. G.A.