Premio a un rescate heroico
La proeza de Ismael Mesquita, el vecino de Mungia que salvó a una madre y a su hija en un incendio en 2013, fue reconocida con el galardón ‘Mi héroe’ en madrid
Bilbao - Por candidatura popular y por los votos de los lectores de la revista One Magazine. Ismael Mesquita, el vecino de Mungia que en 2013 rescató a varias personas y una perra de un incendio en la localidad, ganó el pasado jueves el primer premio One Magazine en la categoría de Mi héroe. Un calificativo que el mismo protagonista ya rehuyó de forma modesta al día siguiente de su hazaña en un reportaje publicado por DEIA.
La acción de Ismael fue de esas que “no se piensan, solamente se tira para adelante y ya está” explicaba a este periódico el 20 de junio de 2013. Su proeza surgió cuando estando en una cafetería, se percató de un incendio en el edificio de enfrente y llamó a los servicios de emergencia.
Mientras esperaban a los bomberos, varios vecinos salieron por su pie del bloque en llamas pero otros se quedaron aislados en las terrazas del tercero y cuarto piso. Ismael entonces actuó. Pidió a los operarios de una grúa que se encontraba en las inmediaciones que la acercasen a la fachada para rescatar a Nieves y a su hija Ainhoa de 16 años, que estaban en uno de los balcones, y a un hombre que estaba pidiendo auxilio en el otro.
Asegurado con un arnés, subió en la grúa y primero ayudó a bajar a la mujer y a la adolescente para después elevarse de nuevo a rescatar al hombre. Al no estar en el balcón, entró dentro de la casa pero no lo encontró, ya que afortunadamente había conseguido salir del incendio él solo. Tras salir al balcón de nuevo vio que la perra de Nieves seguía sola y ladrando en la terraza. No se lo pensó, cogió a Neska, de casi 40 kilos de peso, y la bajó muy nerviosa a la seguridad del suelo.
Con los premios instaurados por el Grupo Atenea, dedicado a temas de seguridad, se quiere reconocer y agradecer la labor de personas anónimas, entidades y empresas que, cada día, ponen sus vidas en peligro. Los galardones bajo el lema Ell@s darían la vida por ti constan de siete categorías entre las que destacan Ejemplo a seguir, Valor seguro o Todo coraje, cuyos ganadores fueron elegidos por un jurado de cinco especialistas en temas de seguridad.
Solo el galardón ganado por Ismael fue otorgado por votación popular de los lectores de la revista organizadora de los premios y de otros medios de comunicación seleccionados por la revista para su difusión, “lo que le da todavía más valor, además de que fuera propuesto también por personas anónimas”, explicaron desde la organización de la gala celebrada el jueves pasado por la noche en Madrid. En concreto, con la categoría de Mi héroe se buscaba “agradecer la actuación meritoria llevada a cabo por una persona o grupo de personas anónimas, con un elevado riesgo, con el fin de salvar de un peligro o amenaza a otra u otras personas que ni siquiera conocían”, indican desde la organización.
La acción heroica del vecino de Mungia fue elegida entre varias decenas de acciones anónimas que quedaron en tres epopeyas finalistas. Los lectores que votaron entre la última selección no lo tuvieron nada fácil.
Los otros dos finalistas fueron Óscar Gutiérrez, un ingeniero voluntario que participó en la evacuación de varios españoles tras el fuerte terremoto sufrido en Nepal, y Jesús Castro González, exportero del Sporting de Gijón, que salvó la vida de un hombre y sus dos hijos que se estaban ahogando en el mar perdiendo la suya en esta acción heroica. A pesar de esta última historia, que conmocionó a la ciudad asturiana, la acción desinteresada de Ismael enganchó más y se alzó con el premio.
“¿Cuál ha sido la mejor parte de haber vivido una situación así? ¿Qué es lo que más le compensa?”, le preguntaron en el escenario nada más recibir el galardón. “La gente, es lo que realmente importa. Mucha gente después me saludaba, felicitando. ¡Enhorabuena! Lo mejor es la gratificación”. Un héroe en todos los sentidos.