trapagaran - No es ningún secreto que el poblado minero de La Arboleda pasa por ser uno de los rincones vizcainos más afamados por su peculiar preparación de las alubias con sus sacramentos, sean estas de Tolosa, de Gernika o de Las Encartaciones. Y es que incluso muchos vecinos de este núcleo encartado desconocen que las antiguas Encartaciones, desde El Regato hasta Lanestosa, poseen variedades leguminosas de gran sabor culinario que se vienen cultivando en la comarca desde hace varios siglos tras la llegada de las primeras semillas americanas.
De hecho, un estudio de campo llevado a cabo por investigadores del Centro Trueba Zentrua, dedicado a la divulgación histórica de la comarca, ha recogido testimonios de baserritarras jubilados que recuerdan la presencia de las alubias en sus heredades. “Esta alubia era la estrella de la comarca hasta los años sesenta por su finura, textura, sabor y rápida cocción. Totalmente olvidada, con una producción actual muy limitada, se ha conservado entre ciertos productores en el Valle de Villaverde, Turtzioz, Karrantza. Sopuerta, Abanto y Gordexola”, sostuvo Ricardo Santamaría, presidente de Trueba Zentrua cuyas alubias, plantadas en el límite de Karrantza con Lanestosa se hicieron acreedoras del premio otorgado en la cata de alubias organizada por la Asociación Cultural Meatzari Goikoa.
“El objetivo de esta cata, es encontrar una alubia que represente a La Arboleda, a este pueblo minero que desde hace casi cuatro décadas es el referente alubiero de la comarca del Gran Bilbao”, reseñó Guillermo del Olmo, portavoz de Meatzari Goikoa.
En la cata, celebrada en el txoko de la Asociación de vecinos de Barrionuevo, estuvieron presentes varios productores de la comarca de Enkarterri que se dieron cita con objeto de buscar la mejor alubia que represente aeste enclave como pueblo referente en el consumo de esta apreciada legumbre.
Casa sabina Esta cata y los objetivos buscados, coincide, además, con la reapertura del restaurante Casa Sabina de La Arboleda uno de los templos alubieros que desde los años setenta promocionó la alubias y el pueblo de La Arboleda. “Nuestra idea es promocionar, poner en valor la alubia encartada que sin duda puede codearse con las mejores alubias vascas”, aseguró De Olmo quien avanzó la intención de los promotores, las dos entidades culturales y un grupo de vecinos del poblado, de “promover la denominación de La Arboleda como pueblo de la alubia con el objetivo de que el impacto mediático del pueblo pueda ayudar a que se promueva y aliente la plantación y el consumo de la legumbre encartada”.
En este sentido, señaló que para el próximo año están estudiando la celebración de un Día de la Alubia y la creación de una Cofradía de la Alubia “para la defensa y promoción de nuestra alubia encartada para lo que esperamos contar con el apoyo del Ayuntamiento de Trapagaran en la defensa de este patrimonio culinario”, añadió Del Olmo.
Una alubia que en la cata llevada a cabo el pasado día 5 de diciembre pasó por las curtidas manos de los alubieros Celestino Pérez y Andoni Gallo, quienes cocinaron hasta once variedades de alubias de productores locales de Abanto, Ortuella, Lanestosa, Karrantza, Zierbena, El Regato (Barakaldo) y La Arboleda (Trapagaran), con los mismos condimentos, en chapa económica y fuego de leña. El resultado fue sometido a una cuarentena de invitados que puntuaron las alubias buscando la mejor legumbre de la comarca.
Once variedades se presentaron a esta cata, tolosana, gernikesa, agarbanzada, etcétera, obteniendo la mayor puntuación la alubia encartada que se denomina “de manteca” en Abanto y Muskiz, “de Guriezo” en el Valle de Vilaverde y Turtzioz y “alubia garbancera” en Karrantza y Lanestosa, recogiéndose también como “orillos” entre otros entrevistados. “Es una alubia roja, de color amarillento, muy fina de piel, de harina muy suave, de cocción rápida, que se mantiene entera después de cocida y que explota en el paladar como si se tratase de manteca”, afirmaron.