EL espíritu perseverante y trabajador de las localidades nacidas en las márgenes de los ríos Nerbioi e Ibaizabal recibió ayer un caluroso homenaje en la VII edición de los DEIA Hemendik Sariak. En este caso, fueron premiados doce colectivos y particulares que encarnan los mejores valores que a cada paso se perciben en este comarca. Colectivos como Hodei Bila, Burdin Hesia Ugaon, o el fallecido periodista Jose Iragorri, entre otros, recibieron en Torrezabal Kultur Etxea de Galdakao un sentido homenaje cargado de emotividad y agradecimiento.
El periodista de Onda Vasca, Xabier Lapitz, fue el encargado de enunciar la lustrosa lista de premiados completada con el Club Deportivo Galdakao, José Miguel Nieva (Padura Saskibaloi Taldea), Basauri Koral Elkartea, la asociación etnográfica Aztarna, Excavaciones Uriarte, la asociación de mujeres Erlantza, Danbolin Txistulari Elkartea, Roaldo Joyeros y el músico Juan Carlos Irizar.
El director de DEIA, Bingen Zupiria, quiso remarcar el “compromiso de este medio con la información más cercana” y alabó la “riqueza y la fuerza” que representaban los homenajeados ayer. En esa misma línea, la teniente de alcalde de Galdakao, Amaia Betolaza, incidió en “el trabajo muchas veces anónimo de personas” que consiguen que se ponga el “foco sobre una labor a veces callada”. La edil, que ejerció de anfitriona, excusó la ausencia del alcalde, Ibon Uribe, que se encontraba en Madrid acompañando, precisamente, a la familia de Hodei Egiluz.
Resultó llamativo ver hasta que punto los premiados representaban esos valores pegados a la historia de la comarca. Símbolo de ello fueron el centenario Club Deportivo Galdakao, que nació vinculado a La Dinamita y por el que pasaron Iragorri o Villar, o el infatigable entrenador del Padura. “Una vez que entras en este club es imposible no entregarte”, explicaba al recoger el galardón este último.
Los premiados en el plano musical -Basauri Koral Elkartea, Danbolin Txistulari Elkartea y Juan Carlos Irizar- lucían igualmente esos valores vinculados al tesón. Fueron quizá quienes mejor apreciaron la actuación del coro de la escuela de Música de Máximo Moreno. Los premiados hicieron gala, además, de la casta que caracteriza a la gente de esta comarca, algo muy patente en el caso de Iñaki García Uribe (Burdin Hesia Ugaon) y Raquel Miragaya (Erlantza). Su desparpajo despertó el aplauso del público, lo mismo que ocurrió en el caso de los propietarios de Roaldo Joyeros, o de Irune Uriarte, de la pionera empresa Excavaciones Uriarte.
Quienes más aplausos despertaron fueron, no obstante, los dos últimos homenajeados: José Iragorri a título póstumo y Hodei Bila. El locutor estuvo presente en el corazón de la viuda del primero, Gurutze Martínez Marañón, quien recordó que las dos pasiones de su marido eran el Athletic y el periodismo. Por su parte, los miembros de Hodei Bila agradecieron la ayuda recibida durante este año a toda la ciudadanía de Galdakao y de Bizkaia. “Lo que parece muy difícil ha sido muy fácil con la ayuda de todo el mundo”, señaló Koldo Ezquerra.
Acompañaron a los homenajeados, por parte de DEIA, Javier Andrés, director general de Editorial Iparraguirre; Kike Hermosilla, director comercial; Jon Goikoetxea, director de Marketing; Josu Molinos, Iñigo Aspiunza, Joana Pérez y Susana Martín. Junto a ellos, entre otros, Itxaso Atutxa, presidenta del Bizkai Buru Batzar; Andoni Manso, de Ferrovial Servicios; Aitor Argote, director general de Mercabilbao; Nuria Álvarez, Kirikidirectora de Emakunde; Asier Iragorri y Etorne Lexartza, además de una amplia representación de la Corporación local.