Moteros rumbo a Loiu

LOS pronósticos hablaban de truenos y de tormentas. Pero ellos son gente que cabalga sobre acero y que viste de negro y cuero: las amenazas meteorológicas no les amedrentan. Faltaría más. La consigna ayer estaba clara: había que poner rumbo a Loiu. Y los moteros cumplieron a rajatabla. Esta localidad de Txorierri celebró ayer la tercera edición de su concentración motera y la cita volvió a contar con una buena respuesta de los amantes de las dos ruedas. Un total de 250 motos se dieron cita en la Herriko plaza del pueblo y sus aledaños. Máquinas impresionantes, elegantes, cañeras, maqueadas y brillantes, llenaron de rugidos profundos el corazón de este municipio que ya ha consolidado esta cita dentro de su agenda.

Fue hace tres años cuando el Ayuntamiento de Loiu puso en marcha esta concentración de motos por primera vez. Hoy, este evento ha ido evolucionando y uno de sus principales cambios radica en el hecho de que la organización viene de la mano de una asociación motera de reciente creación, Txoribikers. El Ayuntamiento de Loiu continúa haciendo una firme apuesta por este evento y trabaja con Txoribikers apoyando la cita económicamente y con infraestructura. “Seguimos apostando por dinamizar la vida social y cultural de la localidad y para ello continuamos con la puesta en marcha de este tipo de eventos”, explicó a pie de plaza Josu Andoni Begoña, concejal de Cultura y Deporte de Loiu. “Tenemos que dar fuerza a las actividades en la localidad y esta concentración motera es una cita muy especial”, resaltó. “Contamos con los Txoribikers que han cogido las riendas de la organización y se involucran mucho en ello”, destacó, poniendo en valor también al grupo de vecinos de Loiu que no siendo miembros de esta asociación ni estando relacionados con el mundo de las motos, se han volcado en ayudar en la puesta en marcha de este evento. “La gente responde para participar y ayudar, y eso es de agradecer”, subrayó.

La climatología no afeó la mañana que transcurrió ya desde primera hora entre abrazos y efusivos saludos entre los moteros que se reencontraban en Loiu. Muchos de ellos son habituales de este tipo de citas y conocían a una buena parte de los otros asistentes. Entre los muchos riders que ayer estaban en Loiu se encontraba Joseba Arberas, presidente de Txoribikers y que, por tanto ayer, hacía las veces de anfitrión. “El objetivo es pasarlo bien con las dos ruedas y con los amigos”, explicaba Joseba, que destacaba además el hecho de que en el valle hay afición por el mundo de las motos. Joseba pone el acento en el trabajo que supone organizar una cita de este tipo. “Nosotros siempre solemos decir que esto es como preparar una boda: te pasas todo el año con preparativos y luego todo pasa en un día”, aseguraba, riendo. Joseba explicó que son muchas las asociaciones de moteros que acudieron ayer a la cita. “Ellos vienen a la concentración y nosotros les correspondemos acudiendo a las que ellos organizan”, explicaba.

Desde Bermeo Una de las asociaciones de moteros que ayer estuvieron en esta jornada fue Izaro Bikers, de Bermeo, que lleva ya casi seis años en marcha y que es precisamente un grupo que ha apoyado mucho a Txoribikers a la hora de poner en marcha la concentración motera de Loiu. “Procuramos ser solidarios, pero no solo con otros moteros: nosotros participamos en eventos que se organizan en nuestro pueblo”, explicó Patxi Martínez, presidente de Izaro Bikers. Patxi es uno de esos moteros veteranos. Nada más y nada menos que cuarenta años lleva encima de las dos ruedas. “En casa había una moto que era de mi padre y con aquella empecé”, recuerda. Ayer acudió a la cita con su Kawasaki Vulcan 1.600, una máquina sólida, bella y potente.

Los moteros participantes en la concentración se subieron a sus máquinas para realizar una marcha por la comarca, e incluso llegaron a Bermeo, donde demostraron ese talante solidario del que hablaba Patxi. Y es que acudieron a un evento solidario que la asociación local Kate Sarea organizó ayer en el municipio costero.

A la vuelta de Bermeo, los moteros hicieron una parada en la sidrería Loiu que colaboró con el evento invitando a los participantes a un hamaiketako.

Las motos ayer rugieron en Loiu a pesar de los cielos plomizos y revueltos que imperaron por la tarde. Esta es una cita ya consolidada en la localidad y tanto Txoribikers como el Ayuntamiento tienen intención de que la concentración siga celebrándose en años venideros. Y así seguirá siendo sin duda. Las motos volverán a poner rumbo a Loiu.