La urbanización de los terrenos de CLH se aprueba después de dos años de espera

SANTURTZI. El Ayuntamiento de Santurtzi aprobó el pasado 2 de abril el proyecto definitivo de urbanización de la operación urbanística más ambiciosa del municipio, de más de 60.000 metros cuadrados. Después de dos años para encontrar una constructora que transformara la zona en residencial, CLH ha llegado a un acuerdo con Viuda de Sainz.

En cambio, para que empiecen las obras aún tendrán que hacer frente a un nuevo obstáculo, un túnel aparecido bajo los terrenos que sirve para transportar mercancías desde el puerto; un hallazgo que obliga, tanto a la constructora como a los propietarios del terreno, a hacerse con un informe en el que se detalle cómo se debe llevar a cabo la edificación de la parcela.

Este contratiempo "se observa con tranquilidad", según detalló ayer Ricardo Ituarte, alcalde de Santur-tzi. "No supondrá mayor dificultad que la que supone para el metro edificar debajo de bloques de viviendas", tranquilizó el primer edil. Una vez con el informe en la mano, el Ayuntamiento podrá comenzar con los trabajos de urbanización, valorados en 7 millones de euros y que durarán once meses.

Ventajas La zona antes habitada por los tanques de CLH no solo dará paso a las viviendas protegidas -un 73% estará protegida-, sino que la transformación se hará extensible a los barrios cercanos como Mamariga y San Juan. El primero contará con una nueva vía de acceso que se abrirá desde el parque de la cerrada y hasta la carretera que une Santur-tzi con Zierbena. "Una operación muy importante ya que Mamariga es un barrio muy poblado y que cuenta con mucho volumen de vehículos, por lo que esto será una válvula de escape para el tráfico", remarcó Ituarte. Además, se crearán en la zona 300 nuevas plazas de aparcamiento "lo que supondrá un beneficio adicional" para Mamariga.

La zona de San Juan ganará un parque cercano, situado en las faldas del monte Serantes, con 24.000 metros cuadrados de superficie. "Hemos querido ser muy respetuosos, que sea una zona rural, agradable para pasear y que no quede alterado por la excesiva urbanización", explicó el primer edil.

Además, se creará una nueva rotonda en la zona baja del barrio que otorgará "mayor seguridad a los vecinos del barrio".

Los espacios verdes ganarán protagonismo con la plantación de más de 500 árboles y la comodidad de los vecinos también, con la realización de una acera ancha y segura a continuación del parque de la Sardinera.