Bilbao. María González Lacabex acaba de fundar en Getxo Animalex, el primer bufete especializado en Derecho Animal. María inicia sola su andadura profesional, pero su idea "es crear un equipo de trabajo detrás de la firma Animalex", reconoce.

Animalex acaba de 'nacer', ¿de dónde surge la idea?

Acabo de empezar, pero el boca a boca ya está funcionando y me están llegando algunos casos, sobre todo, de particulares.

¿Por ejemplo?

Problemas de convivencia entre propietarios de animales y vecinos, casos de negligencia profesional con resultado de daños para el animal, alguna contribución sobre investigación y divulgación sobre Derecho Animal.

Y, ¿por qué un despacho dedicado al Derecho Animal?

Realicé un posgrado de Derecho Animal en Barcelona y la materia me sedujo. Así tomé la decisión de dedicarme a esto específicamente. Me di cuenta de que en materia de defensa animal había un movimiento muy importante pero básicamente de voluntariado y faltaba una parte más profesional. Existen algunas iniciativas tímidas en Madrid y Barcelona, pero no es algo muy generalizado y yo estoy convencida de que poner a los animales en el ámbito profesional es ponerlos en valor. El principal problema de nuestra legislación es que trata a los animales como cosas.

¿En qué punto se encuentra la legislación a ese respecto?

En el tema de los animales, el principal escollo es la consideración que tienen los animales para el Derecho. Los animales tienen estatuto jurídico de bien mueble y ese es el problema. Hay que luchar contra eso y que el Derecho reconozca que los animales no son cosas, son seres que sienten y por lo tanto deben tener un régimen jurídico distinto al que posee un coche o un abrigo, ese es el paso fundamental y que en algunos países europeos y en Cataluña ya han dado.

Es una iniciativa pionera en Euskadi.

Al margen de las colaboraciones voluntarias que puedan hacer algunos profesionales, yo no conozco a nadie que se dedique a este ámbito. Creo que no hay nada parecido y en Euskadi hacía falta una iniciativa de este tipo.

Por tanto, hay todo un mercado que explotar.

Eso habrá que verlo ahora (risas). Más que de demanda yo hablaría de necesidad, la defensa de los animales no es una cuestión de gusto sino de ética. El tema de los animales va calando poco a poco en la sociedad y creando una mayor sensibilidad gracias al trabajo de todas las asociaciones que luchan en favor de esta causa. La legislación también se va desarrollando, aunque muy lentamente.

¿Qué servicios ofrece Animalex?

Información, asesoramiento, formación y, llegado el caso, asistencia letrada en juicio. También, pretendo seguir una línea de investigación y divulgación que es importante en una materia tan novedosa. En esencia, los mismos que cualquier abogado siempre dirigidos a casos en los que esté implicado un animal.

¿Hablamos de mascotas?

Los servicios no solo están dirigidos a animales de compañía sino a todos los animales con los que nos relacionamos: para hacernos compañía; para servirnos de alimento o de vestido; para entretenernos en nuestros momentos de ocio... Cuando hablamos de Derecho Animal lo hacemos en sentido muy amplio, no solo en relación a los animales de compañía.

Uno de esos sentidos tiene relación con las denuncias que interponen las asociaciones protectoras de animales por abandono, maltrato...

Yo pongo mis servicios profesionales a disposición de estas entidades, aunque no estoy vinculada a ninguna asociación en concreto. El valor de mi trabajo está en ofrecer un asesoramiento externo, objetivo e independiente.