Bilbao. La asociación Gorabide, el doctor en Medicina y catedrático de Bioquímica, Félix Goñi Urcelay, y las víctimas civiles de los bombardeos de la Guerra Civil, han sido nombrados ilustres vizcainos 2012. Un año más la Diputación Foral ha seleccionado a personas o entidades que aportan un valor añadido al territorio.

Este reconocimiento tiene como propósito honrar a aquellas personas, entidades o grupos ciudadanos que, por su conducta, servicios o actitudes en cualquier actividad social, hayan contribuido a la promoción de Bizkaia y de sus valores. Este año a la lista de ilustres se añadirán nuevos nombres.

Entre los nombrados se encuentra Gorabide. Una asociación sin ánimo de lucro que se ha destacado, durante sus 50 años de historia, en su labor por la defensa de los derechos de las personas con discapacidad intelectual.

Esta entidad, además de promover el compromiso ético y solidario de la sociedad hacia las personas con discapacidad, gestiona, junto con la Diputación Foral de Bizkaia, diversos servicios sociales especializados para este colectivo. Este ejercicio además Gorabide está de aniversario. Cincuenta años no se cumplen todos los días. Por ese motivo la asociación ha diseñado una larga lista de actividades que se desarrollarán hasta final de año y que incluye la edición de una revista y una exposición itinerante, a través de la que dan a conocer el trabajo que realizan a nivel interno. Sin lugar a dudas este reconocimiento foral será bien recibido por los responsables de Gorabide.

catedrático Otro de los nombres que este año saldrá a la palestra, además de por su excelente trayectoria profesional, por ser ilustre de Bizkaia, es Félix Goñi Urcelay, doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Navarra, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad del País Vasco y director de la Unidad de Biofísica de la misma.

El nombramiento como Ilustre de Bizkaia es un reconocimiento a su extensa y brillante carrera en el ámbito de la docencia y la investigación, según explicó ayer la institución foral. Goñi fue distinguido con el Premio Euskadi de Investigación 2002 por sus estudios sobre la estructura y dinámica de las membranas celulares y por sus contribuciones a la comprensión del mecanismo molecular de la fusión de membranas y al desarrollo de métodos de análisis cuantitativo de la estructura de proteínas.

Finalmente, la distinción de las víctimas civiles de los bombardeos de la Guerra Civil (1936-1939) tiene como propósito homenajearles y "mantener en la memoria la destrucción y el daño sufridos por miles de personas". Un galardón que recupera del olvido unos hechos "graves y duros" que robaron de un plumazo la vida de muchos vascos. Con este premio la Diputación quiere evitar que nada parecido vuelva a ocurrir ni en Euskadi ni en ningún lugar del mundo.