Lemoa. El Ayuntamiento de Lemoa no ha conseguido paralizar la ampliación del vertedero de Lemoa, al menos de momento. El orden del día del pleno celebrado ayer daba la oportunidad a los grupos de tirar por tierra el comienzo del proceso de cambio de tirar del terreno forestal que aspira a convertirse en vertedero. Pero, aunque ningún grupo votó a favor de seguir con el proceso, solo Bildu se mostró a favor de dejarlo zanjado. Así, el único representante del PSE se ausentó de la votación para no tener que emitir una valoración y el PNV se abstuvo.
"No estamos a favor de la ampliación pero, por responsabilidad, nos queremos asegurar de que la paralización del proceso no traiga consecuencias económicas negativas para Lemoa", expresaron los jeltzales. Una opinión no compartida por Bildu, en el gobierno, quien por boca de su portavoz, la alcaldesa Saioa Elejabarrieta, aseguró "no tener miedo" a defender su negativa a la ampliación ante un juez "si esto es lo mejor para Lemoa".
Esta resolución no da a los responsables del vertedero, la empresa Ekonor, vía libre a la ampliación del vertedero ubicado en Lemoatx, ya que deberá superar otros muchos obstáculos en el proceso. Entre ellos, la aprobación definitiva en el propio pleno de Lemoa de la recalificación del suelo. Después, deberá pasar por otras instituciones, como el Departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco, así como por el Ayuntamiento. Será este último quien tenga que conceder o denegar la licencia de actividad por última vez, permiso que deberá volver a solicitar para empezar a utilizar la ampliada instalación.
En lo que sí se pusieron de acuerdo los grupos es en instar a los organismos competentes como son la Diputación y el Gobierno vasco, a que el vertedero incluya medidas correctoras que acaben con los malos olores y las molestias que, sobre todo, están aguantando los vecinos de Boroa y Kortederra en Amorebieta-Etxano. Este Ayuntamiento vecino remitió ayer una carta a los responsables municipales lemoarras instándoles a paralizar la ampliación del vertedero e informándoles de su petición de una "supervisión activa y eficaz por parte de los organismos medioambientales".
El vertedero de Bistibieta está llegando a su límite. De hecho, solo le queda espacio para mantener su actividad hasta 2014. Con la ampliación del 31% de su capacidad, podría continuar con su actividad hasta 2023.