Güeñes. El Ayuntamiento de Güeñes ha aprobado dos mociones en apoyo a los trabajadores de Konecta BTO, que presta el servicio de atención telefónica al cliente de Iberdrola. Once despidos y la propuesta de traslado a otros siete empleados motivaron que dos delegadas del sindicato LAB llevaran a cabo una huelga de hambre de 16 días que finalizó el domingo.

La delicada situación de la plantilla se trató en el último pleno de Güeñes, en el que el equipo de gobierno del PNV y Bildu presentaron sendas mociones. "Expresamos nuestra más enérgica repulsa a la reforma laboral que ha dado pie a los últimos despidos y queremos dejar claro que este grupo utilizará todos los recursos a su alcance para ayudar a conseguir los objetivos marcados por el comité de empresa, que es quien representa a la mayoría de los trabajadores y, a nuestro entender, debe liderar todas las acciones a realizar", puntualizó la portavoz del equipo de gobierno, Mari Jose Aldama. Los concejales del PNV dieron su apoyo al texto, mientras que los demás partidos optaron por la abstención.

Por su parte, Bildu hizo llegar una moción alternativa, que recibió la abstención del PSE y los votos favorables del PNV. El sí jeltzale obedeció a la "responsabilidad política". No obstante, se matizaron algunos puntos. "No estamos de acuerdo con la parte en la que se refleja la petición a Iberdrola para que cumpla con las condiciones de cesión de terreno por parte de las instituciones, ya que, en lo que respecta a este Ayuntamiento, se han cumplido. Tampoco compartimos que el Consistorio llame a la movilización social porque ese papel le corresponde al comité", precisó el concejal Martín Pérez, quien censuró que "el escenario creado por Bildu y LAB busca sacar rendimiento político y sindical a costa de cargar, entre otros, contra este Ayuntamiento con la intención de desacreditar y desunir".