Sentimiento moñiguero

Santurtzi

LA ermita donde muchos vecinos hicieron la primera comunión ya no existe. Tampoco la iglesia donde allá por los años 50 se formó el grupo cultural Mendi Alde. Las huertas que se extendían por las calles han dejado paso a altos edificios de ladrillo, parques y escuelas. Pero hay algo de Kabiezes que sigue manteniéndose en su sitio, la denominación de moñigueros a sus vecinos que pasean el sobrenombre con la cabeza muy alta.

"Somos moñigueros y con mucho orgullo". Mundi Flores, presidente de la agrupación Mendi Alde, nació en el barrio santurtziarra de Kabiezes. "Ha cambiado muchísimo con el paso de los años", cuenta haciendo memoria de los recuerdos que guarda de su infancia. Si Mamariga se identifica por ser un barrio de pescadores, de Kabiezes siempre se han conocido sus baserris donde se trabajaba el campo y el ganado como forma de vida. Y es precisamente por su actividad a los vecinos de Kabiezes se les apodaba como los moñigueros, "de la moñiga de las vacas, moñigueros", explica Flores.

Aunque este no ha sido siempre el nombre con el que se ha conocido a quienes vivían en el barrio santurtziarra, ya que, durante algún tiempo, hubo quien les llamaba El novillo Pinto. "Esto lo conoce muy poca gente, pero los de Urioste nos llamaban así, además con u, el novillu Pintu", explica el presidente de Mendi Alde, que ha montado una exposición para recordar la historia de Kabiezes. "Aún hay vecinos que conocieron el Kabiezes lleno de huertas y gracias a ellos podemos recordar cómo era. Además, la exposición también sirve para dar a conocer a los jóvenes que han nacido aquí de dónde vienen y cómo era antes su barrio, que la mayoría lo desconoce", explica Flores. La muestra, que está abierta en la tienda de Amparito, cuenta con unas 30 fotografías antiguas de Kabiezes, además de expositores que muestran diversos materiales de labranza.

Fotografías La exposición comenzó el pasado día 14 y desde entonces decenas de vecinos se han mostrado interesados en acercar hasta la agrupación cultural diverso material fotográfico del pasado. "Muchos vecinos vienen y reconocen los lugares, la gente que aparece en las fotos o se da cuenta de que tienes más imágenes en casa, de su familia, que nos pueden servir para la exposición y quedan en traérnoslas", cuenta el presidente de Mendi Alde agradecido por la colaboración vecinal y la amabilidad de Luis, el estanquero, que ha cedido el local para la muestra.

"Kabiezes era una aldea y ahora ha cambiado muchísimo", vuelve a recordar Flores enumerando la vieja iglesia de San Pedro, las competiciones en el carrejo de bolos, el viejo estanco de Luis, el palacio Casa Basarte, la casa de Doña Carolina.... "Está teniendo tanto éxito que igual volvemos a montar otra exposición con todas las fotos que estamos recogiendo de los vecinos", avanza. Pero el objetivo de Mendi Alde es más ambicioso. "Queremos poner una imagen en cada lugar donde se encontraba antes un edificio emblemático para que se recuerde", explica. Ese es el verdadero sentimiento moñiguero.