La virtuosa Ezkerraldea se reinventa
El Meatzari Aretoa de Muskiz acogió ayer la gala de entrega de los IV DEIA Hemendik Sariak
HABLAR de Ezkerraldea es sinónimo de empuje, de tenacidad, de hacer de la dificultad virtud, y de la capacidad de superación de sus gentes. Así se puso de manifiesto en la gala de entrega de los IV DEIA Hemendik Saria Ezkerraldea, celebrada ayer tarde en un Meatzari Aretoa de Muskiz engalanado para un evento cuyo objetivo era reconocer el trabajo y la dedicación de diferentes personas, entidades, asociaciones y ayuntamientos de esta comarca en distintos ámbitos.
El periodista de Onda Vasca Xabier Lapitz fue el conductor de una gala donde las recias voces del coro Oihartzuna de Muskiz arrancaron sinceros aplausos del nutrido grupo de premiados e invitados presentes en el auditorio, entre los que no faltaron el diputado foral de Presidencia, Juan Mari Aburto; el diputado de Promoción Económica, Imanol Pradales; y la presidenta de las Juntas Generales, Ana Madariaga.
Antes de proceder a la entrega de premios, el director de DEIA, Iñigo Camino, tomó la palabra para destacar la importancia de estos premios y compartir recuerdos con los asistentes de su época deportiva en el balonmano de Santelices.
Finalizada la alocución se inició la entrega de galardones comenzando por un emocionado, Javier Clemente, el rubio de Barakaldo, el que, como recordó Lapitz, nos hizo "vibrar" con aquel Athletic que surcó la ría con la gabarra en los años 80. Recién llegado de Camerún, recibía el Hemendik Bizkaia Saria como embajador de Ezkerraldea.
Le tomaron el relevo en el escenario muskiztarra Jon y Jon Lekue, de Autonervión, una empresa familiar que hace más de 40 años se instaló en la comarca.
Posteriormente, los focos se posaron sobre la cultura y sobre todo en la cultura vasca a través del grupo Mendi Alde de Santurtzi, que se hizo acreedor del Kultura Saria por sus 50 años de divulgación.
El Gizarte-Erantzukizun Korporatibo Saria fue a parar a la empresa de instalaciones eléctricas Tecuni, que, junto a una prometedora andadura empresarial, se vuelca en actividades sociales. En esta cuarta edición de los premios, el Gizarte Saria fue compartido por dos entidades de gran raigambre en Ezkerraldea: la Fundación Miranda, con más de 100 años al servicio de los mayores en Barakaldo; y la asociación Bikarte, de Abanto-Zierbena, que ha promovido en sus 14 años de vida el acogimiento en Euskadi de más de 1.700 huérfanos rusos. "No podemos arreglar el mundo, pero sí cambiar el mundo de un niño", se sinceraba su presidenta, Julia Asenjo.
El premio Berrikuntza Saria recayó ayer en el emblemático edificio de la Ortuellako Kultur Etxea, marcado por una singular arquitectura en la que se resguarda la vida creativa del municipio minero.
La emoción de la gala subió varios enteros al llegar el momento en el que los familiares del futbolista y entrenador Txutxi Aranguren recogieron el Omenaldi Saria a la memoria de su padre, fallecido este pasado mes de marzo.
La excelente temporada de cuatro clubes deportivos de la comarca también fue reconocida anoche con el Kirol Saria: el Club Ciclista Valle de Trápaga, el Zierbena Arraun Elkartea, el Sestao River y el Club de balonmano de Muskiz.
La gala fue seguida muy de cerca por Víctor Pérez de Guezuriaga y Luis Alberto Aranbarri Amatiño, por parte de Petronor; los alcaldes de Sestao, Zierbena, Trapagaran, Ortuella, Abanto-Zierbena y Muskiz y Galdames, Josu Bergara, Marce Elorza, Xabier Cuéllar, Oskar Martínez, Manu Tejada, Borja Liaño y Carlos Avellanal. Otros que no se perdieron el evento fueron Aitor Bilbao, Xabier Sagredo, Xabier Larrinaga, Mikel Arieta-Araunabeña de la Cámara de Comercio, Enrique y Carlos Otaduy, Pedro Barreiro, del Consorcio de Aguas, Javier Andrés, gerente de DEIA y Kike Hermosilla,Óscar Sáinz y MercedesCareaga, del departamento comercial del periódico.
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