Con esta carita de bihurri posa Aitor Ruiz Ortuzar en el jardín de su casa junto a su perro Lucky, que lo mira atento y precavido por si a nuestro protagonista le da por hacer alguna de esas travesuras por las que es conocido. Sin duda, seguro que está esperando a que sus aitas, aitites, amama, osaba-izekos y sus primos Jon y Ander le den los oparis de su recién celebrado segundo cumpleaños.