Santurtzi. La cercanía al mar y a sus inclemencias meteorológicas provoca que los edificios de Santurtzi, especialmente los situados en zonas altas o cerca de la costa, se vean más expuestos a los vientos del norte y a la acción del salitre. Algo que los técnicos municipales han podido constatar en los colegios de Las Viñas y de Emilia Zuza en la zona de Kueto, en el barrio de Kabiezes. En ambos casos las instalaciones se ven aquejadas por similares problemas de humedades, filtraciones e incluso de desprendimientos en sus fachadas lo que ha puesto en marcha un proyecto de recuperación que globalmente supondrá una inversión cercana a los 400.000 euros y aprovechará el período vacacional de los alumnos.
En el caso del colegio Las Viñas, sus fachadas serán objeto de una importante reforma integral que se extenderá a lo largo de los dos próximos meses y que se espera interfiera lo menos posible en el desarrollo de las clases. "Aunque está en buen estado por el mantenimiento que se le ha ido haciendo, requiere de una limpieza y mejora integral y es lo que en estas semanas se va a llevar a cabo", señaló el concejal de Cultura y Euskera, Danel Bringas, mientras los obreros se afanaban en levantar el andamiaje para acometer estos trabajos que en conjunto costarán 270.000 euros.
La fachada se encuentra en buen estado, aunque algunas plaquetas de ladrillo caravista se estaban desprendiendo y "podían provocar un problema de seguridad a los usuarios del edificio. Esto ha hecho necesario su reparación mediante picado y sustitución para evitar posibles accidentes futuros", añadió Bringas. Asimismo, se acometerá la impermeabilización de las dos cubiertas que hacen de terrazas de las aulas, se resolverá el problema de humedad en la planta baja de la fachada norte y se saneará, limpiará y pintará el edificio.
"Vamos a darle un aspecto más acorde a un edificio de carácter escolar, más característico de un colegio, con colorido", esbozó Bringas quien destacó que se revestirá la fachada buscando el realce de los volúmenes salientes en la fachada norte y sur.
En el caso del colegio Emilia Zuza, edificado en 1970, las obras que acometerá el Ayuntamiento consisten en la sustitución de todos los ventanales orientados al norte "ya que los actuales soportan filtraciones de agua y en invierno se producían importantes fugas de calor", significó Bringas, quien valoró en 125.000 euros la inversión a realizar.