El Museo Guggenheim Bilbao está revisando las grabaciones de sus cámaras de seguridad para conocer la procedencia de la caja que ha hecho saltar las alarmas y que ha obligado a desalojar la pinacoteca durante dos horas y media durante la mañana de este sábado.
A las 12.30 horas, la Ertzaintza ha levantado el cordón de seguridad que había establecido para inspeccionar el paquete localizado en el interior de la instalación.
Desde el museo han confirmado que unos 130 visitantes se encontraban en el edificio en el momento en el que se ha dado la alarma y se ha avisado a la Ertzaintza, tal y como dicta su protocolo de seguridad. Alertados los servicios de emergencia, se ha desalojado a los empleados y visitantes, y la policía ha establecido un perímetro de seguridad en los alrededores del museo, mientras los artificieros examinaban el elemento sospechoso.
Una vez comprobado que se trataba de una falsa alarma, se ha levantado el cordón policial y los cientos de turistas que esperaban para visitar la pinacoteca han ido haciendo una larga cola para acceder al interior.
Esta interrupción de unas dos horas y media del horario de visitas no ha provocado incidencias significativas en su funcionamiento, debido a las dimensiones de la instalación y a los protocolos regulados de acceso y desde el museo aseguran que todo ha procedido con "bastante tranquilidad".