Bilbao vuelve a agrupar a los amigos de Unamuno
El “bochito” del escritor y pensador bilbaino relanza esta semana la asociación que pretende reivindicar su figura con diferentes medidas como la creación de una ruta literaria o la dedicación de un espacio en uno de los museos de la villa
Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado”. Siguiendo la recomendación de esta frase de Miguel de Unamuno, que invita a mirar al futuro, un grupo de bilbainos se ha propuesto mantener vivo el legado del escritor y pensador bilbaino de cara a las próximas generaciones. Para ello han relanzado la Asociación de Amigos de Unamuno, aunque su intención es cambiar de nombre –si el registro lo permite– para pasar a ser Asociación Miguel de Unamuno Elkartea. En cualquier caso, el objetivo que los mueve es reivindicar su pensamiento y su obra literaria. “Bilbao tiene que utilizar a esta figura de nivel mundial”, considera Mikel Etxebarria Dobaran, presidente de la asociación constituida el pasado miércoles. En esa línea, abogan por crear una ruta literaria que atraviese diferentes puntos de la ciudad, así como dedicar un espacio a su persona en alguno de los museos de la villa.
Unamuno, el incomprendido
La revitalización de la asociación, mediante una reunión a la que asistieron entre 25 y 30 personas, ha ocurrido justo 39 años después de su creación en 1986. En esa primera asamblea estuvo presente Pablo Zapata Lerga, nombrado ahora presidente de honor. “El alma mater de todo esto fue el mejor unamuniano del mundo mundial, Ángel María Ortiz Alfau”, rememora este filólogo, quien señala que en 2003, cuando falleció, se hizo una nueva junta con Juan Manuel Molino, pariente de Unamuno, a la cabeza. No obstante, la asociación se fue extinguiendo poco a poco, hasta que el año pasado, después de que Unamuno fuera nombrado Honoris Causa en la Universidad de Salamanca, Zapata Lerga escribió un artículo sobre “Unamunidad”, como él mismo explica.
Mikel Etxebarria se puso en contacto con él y decidieron lanzar una invitación, por distintos medios, abierta a la ciudadanía. Tres reuniones después han conseguido relanzar la misma asociación. “Pensamos que era mejor seguir el hilo histórico; además, había algunas personas que estuvieron en sus orígenes”, apunta el actual presidente, quien indica, no obstante, que no es un coto cerrado y que “todo aquel con espíritu unamuniano será bienvenido”. En ese sentido, revela que su intención es que haya gente de todas las edades, por lo que instan a ponerse en contacto a través de este correo: mibotxito@gmail.com. “No hace falta tener un club de jubilados”, bromea este economista, quien defiende que es “bueno” que la juventud conozca a Unamuno, a ese autor responsable de la célebre frase “el mundo entero es un Bilbao más grande”.
"UNAMUNO ES DE TODOS"
“El objetivo de la nueva fundación de la asociación es recalcar que Unamuno es de todos”, garantiza Pablo Zapata, quien recalca que el escritor bilbaino tuvo tres candidaturas al Nobel. “Es el vasco universal más grande que ha dado la historia”, considera el filólogo, quien lo emparenta con otros autores europeos como Ibsen o Pirandello. “Es tan único que leía en 12 idiomas y consiguió, en vida, que sus obras tuvieras seis, siete y hasta ocho ediciones en Alemania”, apunta. En esa línea, el actual presidente de la asociación considera que su pretensión es reivindicar su figura desde el punto de vista cultural. “Conviene que este Bilbao cosmopolita lo tenga como referente”, asevera.
Unamuno, nacionalista vasco, “casi, casi”
Porque ese orgullo por la ciudad que lo vio nacer era, además, una de las señas de identidad de Miguel de Unamuno. “Fue un enamorado hasta los tuétanos precisamente por su ausencia”, considera el Pablo Zapata, quien recita lo siguiente como ejemplo: “Poco me importa que se transforme y cambie la villa del Nervión, si en el relicario de mis memorias infantiles permanece incólume mi Bilbao, mi bochito, el mío, el mundo de mi infancia y de mi juventud”.
Por ello, consideran que ese afán por la villa podría devolverse a través de una ruta fija que siguiera algunos de los rincones que fueron importantes en su vida en Bilbao: como el número 16 de la calle Ronda, donde nació, o en el 19 de la calle Correo, donde estudió. “En algún momento la hubo, como Ramiro Pinilla la tiene en Getxo. Ahora que Bilbao es muy turístico podría volver a promoverse”, asevera Etxebarria, quien apunta que hacen falta conferencias, artículos... que hagan referencia al escritor y filósofo que ya cuenta con un concurso de ensayos impulsado por el Ayuntamiento de Bilbao. “Queremos que en algunos de los múltiples museos haya un hueco para Unamuno”, añade el economista, quien cita el Euskal Museoa, que además se ubica en la plaza cuyo nombre honra al poeta, como una opción lógica.
"ERA UN ANTIFASCISTA"
“Lo primero que vamos a hacer es tocar puertas, a pesar de las reticencias que ha habido a veces para reivindicar el lado cultural de Unamuno”, reconoce el actual presidente de la asociación, consciente de que su figura ha sido controvertida. “Se le criticó su apoyo al franquismo cuando Franco lo que venía a decir era que quería corregir la República. Enseguida se dio cuenta de que aquello era una agresión enorme”, matiza, en ese sentido, Etxebarria, a lo que Pablo Zapata añade: “Era un antifascista republicano liberal que no cambió de manera de pensar, sino que lo que cambiaba era la realidad que le rodeaba”. En esa línea apunta que tenía más contradicciones que nadie, pero que no las ocultaba. “Como decía Azorín, el día que entendamos a Unamuno, dejará de ser Unamuno”, señala el filólogo, quien recuerda que hablaba euskera a pesar de que en alguna ocasión hizo declaraciones en su contra. De lo que no cabe duda es de que Unamuno abogaba por la verdad desde el punto de vista del humanismo. Así lo considera Etxebarria: “Recuperar a Unamuno hoy en día, que estamos con las verdades alternativas y las noticias falsas, es aún más acuciante”.