El mejor amigo del hombre se está convirtiendo en uno de los clientes más solicitados de la hotelería. Quizás sea un efecto pospandémico o una necesidad del mundo moderno, pero cada vez más, las personas rehúsan disfrutar de sus vacaciones sin sus mascotas. Bilbao alberga numerosos espacios para el disfrute de los miembros más peludos de la familia, y los hoteles no podían dejar de ser uno de ellos. Hasta 160 alojamientos entre hoteles, albergues y apartamentos ofertan esta posibilidad en la villa.

Hace décadas la mayoría de establecimientos hoteleros no tenían como prioridad aceptar animales. Sin embargo, en la actualidad, es casi una necesidad. Es un mercado consolidado que se toma en gran consideración durante la temporada de verano. Los precios por la estancia de un perro o gato oscilan entre los 20 y 40 euros. En algunos casos esta cifra se carga a los clientes por noche, y en otras por estancia.

“Nosotros nos volvimos pet-friendly poco antes de la pandemia, pero la cantidad de mascotas que hemos recibido es inmensa”, dijo Joana tras el mostrador del hotel NH Collection Villa de Bilbao. Explicó que el hospedaje de mascotas se está convirtiendo en algo cada vez más habitual en Bizkaia y específicamente en San Mamés, nunca falta. En el caso de NH Collection una mascota supone 35 euros de suplemento por estancia. Joana aseguró que como se ha hecho con los huéspedes de toda la vida, se aseguran de que los animales estén lo más cómodos posible y con las necesidades básicas más que cubiertas.

“Nos aseguramos de que tengan todo lo que necesiten para disfrutar de su estadía”

Alberto Cueta - Empleado del Catalonia Gran Vía Bilbao

Se habla mucho del incremento de turistas ingleses, franceses y alemanes, pero poco de la evidente presencia de sus canes, quienes fielmente los acompañan en sus viajes y con curiosidad observan los alrededores de las plazas y los parques vizcainos. En la entrada giratoria del Catalonia Gran Bilbao sucede algo parecido. Las personas entran y salen continuamente junto con sus perros amarrado a una correa, listos para el paseo del día. Alberto Cueto, empleado del Hotel, dice que los meses de verano son los más llenos del año. Además, trabajar con mascotas tiene cierta gracia. Entre risas, Alberto contó que una vez, la mascota de un huésped “salió corriendo por el pasillo” y sin darse cuenta, en pocos segundos la mitad del personal ya lo estaba persiguiendo. “Tuvimos que camelarlo un poco para cogerlo, pero es parte del trabajo y nos divertimos mucho”.

“El incremento tras la pandemia ha sido impresonante, casi el triple”

Reyes Herrán - Directora del Abba Euskalduna Hotel

Frente al icónico estadio San Mamés, otro establecimiento hotelero declaró ser un gran amante de los animales. El Abba Euskalduna Hotel acepta mascotas desde sus inicios, y su directora, Reyes Herrán, lo manifestó con gusto. “En pospandemia se ha triplicado la demanda” -señaló- “Hemos visto ingresar hasta seis o siete perros por día, antes solía ser uno”. “En lugar de pagar un hotel canino, le pago un hotel conmigo”, concluyó. En el caso de este hotel, la estancia de una mascota cuesta 22 euros por noche, pero “vale la pena traerlos, los tratamos como uno más de la familia”.