BILBAO - La Ertzaintza y la Policía Municipal de Bilbao han comenzado a vigilar a agresores machistas. Una medida novedosa que responde además a una repetida petición de las asociaciones de mujeres. “Estamos empezando a hacer vigilancia a las personas agresoras. En lugar de a la mujer, vigilamos al agresor”. Tomás del Hierro, concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Bilbao, dio a conocer ayer el trabajo que está realizando desde el Área para proteger a las mujeres víctimas de la violencia de género e informó de que en estos momentos hacen acompañamiento a 100 mujeres que han sufrido agresión. La preocupación por esta lacra social se verá plasmada hoy en la reunión que se va a celebrar del Pacto por la Seguridad donde se verán reflejadas propuestas en este sentido.

El pleno que se celebró ayer abordó los mayores problemas que sufre la mujer en pleno siglo XXI y las soluciones a implementar. Coincidía con el Día Internacional de la Igualdad Salarial, próximo al 8 de marzo con una convocatoria de huelga en ciernes y unos datos de seguridad, publicados hace escasos dos días, que evidencian que la violencia de genero no cesa. En Bizkaia, “los delitos contra la libertad sexual se han disparado en el último año, un 23% en Bizkaia, y en Bilbao casi se han duplicado”. En este contexto no es de extrañar que la mujer fuera protagonista del pleno.

El edil responsable de Seguridad Ciudadana informó de que entre las medidas para proteger a la mujer víctima de violencia de género, Policía Municipal y Ertzaintza han iniciado la vigilancia y seguimiento a la persona agresora. Del Hierro informó de que se trata de conocer las actividades de la persona agresora o contrastar que corresponden con las informaciones que constan y que no invade la zona de protección de la víctima. Para ello, se realizan entrevistas y se solicita información al autor y se está en conocimiento de cuándo ingresa en prisión, cuándo sale o de si tiene permiso penitenciario.

El concejal explicó que 20 agentes, 3 de ellos mujeres, integran la inspección de policía judicial de la Policía Municipal, y que disponen de formación en violencia de género. Una de las agentes es precisamente formadora de otros policías. También puso de relieve que “la Policía local lleva a cabo un procedimiento integral de atención a las víctimas de violencia de género, incluida la recogida de denuncias y las medidas de protección”. Y, en este aspecto, adelantó que en la comisaría de Miribilla se está habilitación una estancia especial para estos casos. Estas explicaciones razonaron la desestimación de la propuesta planteada por Udalberri que solicitó establecer dentro del organigrama de la Policía Municipal, una unidad policial con formación especializada en violencia machista que atienda esta tipología delictiva.

El concejal de Seguridad detalló también que las medidas de protección están divididas en tres niveles: básico, alto y especial, incluyen la instrucción a las víctimas en medidas de autoprotección, contactos telefónicos y acompañamientos. “Hemos tenido recientemente un caso de protección especial de una mujer y una niña de 14 años a las que teníamos vigiladas las 24 horas del día, hasta que ahora, por fin, ha ingresado en prisión”. Tomás del Hierro señaló que el año pasado hubo en Bilbao 119 denuncias por violencia machista y que la Policía local se ocupó de 36 órdenes de protección. Aseguró que, en su procedimiento, la Policía Municipal de Bilbao se compromete a asistir a una mujer en situación de riesgo “en menos de 10 minutos”, así como prestar una atención de “calidad” en la presentación de denuncias, a acompañar y orientar a la víctima “en todo el proceso”, y proporcionar seguridad y protección a la mujer.

La portavoz de Udalberri, Carmen Muñoz, señaló que el Ayuntamiento hace cosas frente a la violencia machista, pero consideró que “no es suficiente”, y reclamó la formación “especializada y obligatoria” para todos los policías locales.

El concejal del PP Oscar Fernández Monroy defendió que es necesario profundizar en la formación de los agentes dado que “no es lo mismo denunciar un hurto que un delito contra la libertad sexual, que requiere cierta sensibilidad y discreción”.

Izaskun Guarrotxena, de EH Bildu, respaldó que los policías dispongan de formación específica, aunque lamentó que la protección llegue cuando las mujeres “ya han sido víctimas”. La edil de Ganemos Goazen Bilbao, Conchi García, dijo que es necesario “poner en valor la importancia de la víctima en todas las fases de la intervención policial”, de manera que se evite una “segunda victimización”.

Pero, no solo se debatió sobre violencia de género, sino también sobre brecha salarial. El Ayuntamiento de Bilbao se asegurará de que la adaptación de los pliegos tipos del Consistorio a la nueva Ley de Contratos del Sector Público garantice la igualdad salarial por razón de género. La concejala responsable de Alcaldía, Gotzone Sagardui explicó que la anterior ley recogía ya la igualdad salarial, aunque la nueva normativa exige a las empresas una mayor aportación documental, y recordó que el Ayuntamiento de Bilbao ya aprobó en septiembre de 2016 la incorporación de este concepto a los pliegos de contratación. El teniente de alcalde del PSE, Alfonso Gil, dijo en tono crítico que las mujeres representan el 70% de quienes cobran el Salario Mínimo Interprofesional y ocupan la mayoría de contratos a tiempo parcial, aunque afirmó que el Ayuntamiento bilbaino “quiere seguir estando en vanguardia” con la defensa de las garantías laborales. No obstante se negó a que se plantee como un debate entre hombres y mujeres.