Bilbao - Con el firme propósito de que el protagonismo recaiga en las víctimas de todo tipo de violencia, ayer se constituyó el primer Foro Bilbao para la Paz y la Convivencia, compuesto por veinte personas entre las que hay víctimas, grupos políticos y personas conocedoras y expertas en la materia. Se trata de un espacio de encuentro cuya creación ha sido impulsada por el alcalde de Bilbao -lo considera una apuesta personal- con el objetivo de promover actuaciones y programas municipales encaminados a la búsqueda de la convivencia en la villa. Un propósito que, sin embargo, no contó con la unidad política deseada por Juan Mari Aburto -y confirmada en un primer momento por todos los partidos con representación municipal-, ya que el PP decidió desmarcarse del foro al considerar que EH Bildu dio “la callada por respuesta” por no condenar el terrorismo de ETA.
Instantes antes de que finalizara la reunión que tuvo lugar en el Salón Árabe de la casa consistorial, el portavoz popular Luis Eguíluz abandonó la sesión protagonizando la nota discordante de la jornada. Según expuso a los medios, han decidido quedarse al margen porque plantearon “una cosa básica”, que los integrantes del foro realizaran “una reflexión” sobre qué han hecho “todos a favor de las víctimas y para que finalizara el terrorismo”. Según afirmó Eguíluz, al solicitar que se condenara el terrorismo de ETA “ha habido quien no ha contestado y quien ha tratado de dar cobertura a esos que no han contestado”. Posteriormente, concretó que se refería a EH Bildu, coalición con la que dijo haber sufrido “una gran decepción” al pensar “que estaba cambiando”.
Con esta decisión, los populares mantienen la línea defendida por el PP en el Parlamento Vasco, donde se han opuesto a compartir mesa con el resto de los grupos en la ponencia de Memoria y Convivencia. Mientras tanto, el resto de los partidos municipales hicieron piña al no querer realizar ninguna declaración respecto al desplante de Eguíluz, cuya intención de abandonar el foro se pudo vislumbrar previamente, ya que antes de la reunión rehusó posar para la fotografía de familia.
Tras el encuentro en el que también estuvo presente Aintzane Ezenarro, directora de Gogora, todos los grupos recalcaron que el protagonismo del foro es de las víctimas, a quienes se debe escuchar. “Tras muchos meses de discreto trabajo, entre todos los grupos políticos del Ayuntamiento, las personas que han sufrido el azote de la violencia en sus vidas y con la ayuda de personas expertas y facilitadoras, hoy abrimos una nueva página en la memoria histórica de Bilbao”, afirmó el alcalde, quien fue muy breve puesto que prefirió ceder la palabra a las víctimas y a los expertos en la materia.
Dori Monasterio, una de las hijas del taxista Fermín Monasterio, el primer civil asesinado por ETA en 1969, fue quien leyó las bases sobre las que se asentará la actuación del foro. Según señaló, los valores en los que se establece son la “empatía y la solidaridad con todas las víctimas para que juntas superemos definitivamente las actitudes de indiferencia y aislamiento que hemos padecido muchas de nosotras”. También destacó valores como la “responsabilidad y el compromiso para visualizar lo sucedido y compartir testimonios de relatos” . Además, se promoverá la “tolerancia y respeto a la diversidad como punto de partida para acercarnos a las diferentes víctimas” ya que se asume “como positiva la pluralidad de la sociedad vasca”.
A su vez, Maitane Etxebarria, miembro de Lokarri, leyó el comunicado en el que se adoptaron varios compromisos en euskera. Uno de ellos consiste en “reconocer a las víctimas sin utilizarlas ni pretender apropiarnos de su sufrimiento”, ya que “las víctimas son plurales, no son patrimonio de nadie y su reconocimiento sí es responsabilidad de todos”. También se tratará de “propiciar el diálogo con las víctimas, y entre ellas, en la búsqueda de un consenso social y político amplio”. Por último, se comprometieron a “colaborar con las instituciones públicas para seguir desarrollando un marco legal que reconozca y ampare a todas las víctimas”.
“Ilusionante” Tras la reunión, Mari Jose Agirre, hermana de Txema Agirre, miembro de la Ertzaintza que falleció en un atentado con arma de fuego por ETA junto al Guggenheim en 1997, calificó la iniciativa de “ilusionante”. Según señaló, nunca antes había participado en un encuentro de estas características. “Vine a una primera reunión a ver qué era y cuando vi que estaban todos, porque entre todos tenemos el don de la palabra y podemos hablar de lo que sea respetándonos, dije que sí”, expuso Agirre, quien reconoció que “al mismo tiempo es doloroso porque pones caras a los familiares de las víctimas. Empatizas con ese dolor que sienten padres, hijos, esposos o hermanos”.
Además de Dori Monasterio y Mari Jose Agirre, Manu Cabacas, Fina Liceranzu, Jose Goikoetxea, Inés Núñez de La Parte, Javier Batarrita, Edurne Brouard, Abel Uceda, Leonor Regaño, Belen Mentxaka y Conchi Fernández componen el colectivo de víctimas que se han sumado al foro, donde se incluyen además de víctimas de ETA o de los GAL, de la policía franquista, de la Policía Nacional o de la Ertzaintza.
El foro, que en principio celebrará dos reuniones anuales en sesión ordinaria, estará presidido por el alcalde Juan Mari Aburto, con dos representantes de Alcaldía como vocales, Go-tzone Sagardui y Aitor Bilbao, mientras que Josune Ariztondo será la secretaria. Además, estarán presentes todos los partidos municipales, salvo el PP, representados por Nekane Alonso (PNV), Ines Ibáñez de Maeztu (PSE-EE), Aitziber Ibaibarriaga (EH Bildu), Carmen Muñoz (Udalberri) y Samir Lahdou (Goazen Bilbao).
Por los especialistas en reconciliación y convivencia estarán Maitane Etxebarria, Ramón Múgica, Ángel María Unzueta e Isabel Urquijo.