El metro ‘importa’ 10.000 usuarios al mes del clausurado ascensor de Begoña
Los usuarios avalan el elevador de la estación pero quieren que se abra cuanto antes su anterior transporte vertical
Bilbao - Unos 10.000 usuarios al mes. Esa es la cantidad de nuevos viajeros que ha importado Metro Bilbao del ascensor de Begoña que unía hasta el pasado mes de julio la calle Esperanza con el parque de Etxebarria. Diez mil viajeros que utilizan los dos elevadores que sirven a los usuarios del metro y que desde la estación del Casco Viejo conectan con la entrada de los campos de fútbol de Mallona.
El elevador fue cerrado el pasado 8 de julio tras una decisión unilateral de la concesionaria Ascensores a Begoña S.A., la cual abandonó el negocio ante el descenso de viajeros registrado en los últimos años, circunstancia que achacó al Ejecutivo vasco.
Una decisión que dejó sin transporte a los vecinos de Begoña y los usuarios del parque de Etxebarria. Además supuso la apertura de una disputa administrativa y jurídica entre la concesionaria y el Gobierno vasco, como competente del transporte, que le ha impedido ocupar a Lakua las instalaciones.
Según cifras aportadas por la compañía ferroviaria, desde el 15 de septiembre en que se puso en marcha el nuevo servicio, acordado por el Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB) y el Gobierno vasco, hasta el pasado 6 de noviembre, han utilizado el ascensor 19.829 personas.
Dos títulos nuevos Son los viajeros que se han montado en el transporte vertical utilizando el billete especial que las autoridades del transporte crearon para la ocasión y cuyo coste es el mismo que los usuarios pagaban en el ascensor clausurado.
Así, el CTB activó un bono exclusivo de 10 usos con un coste de 35 céntimos cada viaje y otro billete ocasional con un coste de 0,45 euros. Incluso para los mayores portadores de la barik gizatrans, el coste es más barato aún, 32 céntimos de euro.
Los dos títulos están disponibles en las máquinas expendedoras existentes en el vestíbulo de la estación del metro, ubicado al final del acceso que conecta con la plaza Unamuno, y las instaladas al otro lado de la línea de validación de los tickets. Lógicamente, por el ahorro económico que supone, el uso del bono es mayoritario. De los casi 20.000 usuarios registrados 16.482 utilizaron el billete de diez viajes mientras que 3.347 pagaron los 45 céntimos del título único.
Hay que tener en cuenta que aquellos usuarios que utilizan el metro antes o después de montar en el ascensor, el viaje vertical es gratuito, mientras que si solo se toma el ascensor pagando con la barik el coste se eleva a 82 céntimos, lo que cuesta un viaje en el suburbano en la zona 1. Fuentes de Metro Bilbao consideraron que “no se han generado nuevos clientes con los billetes creados ex profeso para el ascensor”, y creían que simplemente se han trasladado los usuarios de un ascensor a otro. Eso sí, para el suburbano ha supuesto un mayor tránsito de usuarios y de viajes en los dos elevadores. El cálculo del metro es que el incremento total del uso de los ascensores es de casi un 20%.
Según las estadísticas que manejan, si el pasado año utilizaban de media diaria el transporte vertical 1.278 personas, en los casi dos meses en que se ha prestado este nuevo servicio la cifra se ha incrementado hasta los 1.528 de media.
A pesar de este mayor tráfico, los ascensores están aguantando sin problemas “y no se ha generado ningún problema mecánico o de cualquier otro tipo”, indicaron. Otro dato aportado es que la jornada en que se batió el récord de usuarios del ascensores del Casco Viejo fue el pasado 11 de octubre, día de la celebración de la Virgen de Begoña, con un total de 3.811 personas.
Llama la atención que con esta media de 10.000 pasajeros nuevos que se montan al mes en los ascensores del metro, el pasaje perdido por el elevador de Begoña ha sido muy elevado. Según los datos aportados por el CTB, en su balance del transporte en Bizkaia de 2012, el último en el que se le facilitaron los datos por parte de la empresa concesionaria, un total de 390.000 viajeros utilizaron el transporte clausurado, es decir, 32.500 personas de media cada mes.
Cambio de dinámica Por lo que respecta a los usuarios, Paco Lezama, portavoz de la plataforma de vecinos que se creó poco antes de la salida de la concesionaria del servicio, aseguró ayer que “simplemente está siendo un sustituto provisional del ascensor de Begoña, que es el que queremos que se ponga en marcha cuanto antes”.
Lezama ponía en valor que el coste de los viajes sea el mismo que tenían que abonar con anterioridad pero veía como un aspecto negativo el desplazamiento obligado a la estación. El portavoz indicó que “se ha tenido que cambiar la dinámica ya que antes se tomaba de forma mucho más fácil el ascensor en la calle Esperanza y ahora tenemos que ir hasta la plaza Unamuno y entrar por ese acceso hasta la estación y luego coger el ascensor. Se da bastante más vuelta”. Lo que esperaba este usuario habitual es que “pongan cuanto antes en marcha el otro ascensor y que sea gratis como prometieron el Gobierno vasco y el Ayuntamiento”.
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