COSMOPOLITA, creativo, peculiar, regeneración, dignidad, multicultural, apoyo, tradición, cotidiano, moderno, emprendedor, integrador. Son términos que describen Bilbao La Vieja, el lugar donde desde hace cinco años reside Ruth Juan, autora del libro y la exposición Bilbao La Vieja. Espacio de tolerancia, que está disponible hasta el próximo 4 de junio en la ExpoGela de BilbaoHistoriko, situada en la calle San Francisco de la villa. "Es un barrio duro, pero con mucho encanto", describió la ilustradora catalana, durante el acto de presentación de su obra.
Sin soltar su joya más preciada de la mano -el libro- y con las láminas gráficas de fondo, las ilustraciones compuestas por Ruth Juan nacen de la propia experiencia vivida en BilbaoArte durante un año, a través de una beca que le ha permitido crear su primer proyecto propio. "Son zonas muy vivas de la ciudad, tienen mucha identidad, conviven muchos colectivos y hay muchos contrastes culturales", contó respecto a Bilbao La Vieja, San Francisco o Zabala. Desde el barrio barcelonés del Raval, Ruth llegó a Bilbao sin conocer la ciudad, "pero me sentí como en casa desde el primer momento, muy a gusto. Le tengo mucho cariño a Bilbao La Vieja".
A través de un formato sencillo y fácil de entender, el libro Bilbao La Vieja. Espacio de tolerancia esconde en sus dibujos el reto de atraer a la gente que "por prejuicios o desconocimiento" no se acerca a estos barrios de Bilbao. "Estaba principalmente enfocado a gente de fuera. No pensaba que el libro interesaría tanto a los bilbainos. Les gusta tener otra visión de este lugar, se reconocen en los espacios y me he sentido muy apoyada por los vecinos", confesó Ruth, en la ExpoGela de BilbaoHistoriko.
Sentido de identidad Las gaviotas sobrevuelan en primer plano sobre la ría de Bilbao, esas aguas que dividen Bilbao La Vieja y el Casco Viejo. Las láminas tridimensionales de Ruth llevan a quienes las contemplan a un barrio "lleno de dignidad y un espacio lleno de tolerancia", explicó Ruth, haciendo referencia al título de la obra. Tal y como explicó Unai Aizpuru, presidente de BilbaoHistoriko, "este tipo de acciones y eventos refuerzan el sentido de identidad de un barrio que tiene una historia y una dignidad muy elevada. Llena de orgullo a la gente y genera orgullo de pertenencia", subrayó Aizpuru, al mismo tiempo que destacó "el espíritu de acoger a gente" que siempre ha tenido la zona. Después de "empaparse de todas las historias" que le contaron los vecinos de Bilbao La Vieja, Ruth Juan se animó a ponerse manos a la obra, con el objetivo de "crear mensajes positivos". Es una obra de arte que está compuesta de distintos elementos que conforman una manera didáctica de poner en valor las cualidades de una zona para muchos desconocida. El libro ya está a la venta por 15 euros y se comercializa junto con un mapa del distrito bilbaino.
A Ruth se le ilumina la cara cuando habla de Bilbao La Vieja. Ahora pretende iluminar al resto con su arte, enseñando la riqueza de estas calles bilbainas.