BILBAO. Campo manifestó el miércoles, durante la presentación a los medios del balance económico del ejercicio 2012 y las previsiones para 2013, que el sector vizcaino del comercio tradicional de carácter familiar se encuentra "en alerta roja" por la constante bajada de ventas y cierres de establecimientos y, tras asegurar que vive el peor momento de su historia reciente, avisó de que "no puede soportar esta situación mucho más".
Jon Aldeiturriaga, el gerente de la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo, una de las más potentes de Bilbao que agrupa a importantes e históricos negocios familiares, ha manifestado a EFE que no suscribe el diagnóstico de la patronal vizcaina en lo que se refiere al Casco Viejo.
Tras reconocer que "las cosas están difíciles" y que "los alquileres están caros", ha precisado que "a pesar de todo, hay proyectos, hay ganas y hay intención de abrir comercios en el Casco Viejo y, de hecho, cada vez están abriendo tiendas nuevas".
"También es verdad que otras cierran, pero el equilibrio es prácticamente paritario. Por eso, en el Casco Viejo, yo no puedo suscribir esa sensación de debacle", ha rematado.