Bilbao. El Ayuntamiento de Bilbao ha iniciado una ronda de contactos con los representantes de los diferentes colectivos que conviven en el barrio de Bilbao La Vieja, San Francisco, Zabala y Zabalburu. Los concejales de las áreas de Seguridad Ciudadana, de Igualdad, y de Sanidad y Consumo -Tomás del Hierro, Oihane Agirregoitia y Mariano Gómez, respectivamente- acudirán a diversos encuentros con los líderes religiosos, los movimientos vecinales y los hosteleros para apaciguar los ánimos del barrio.

Los primeros acercamientos se llevaron a cabo en la mañana de ayer cuando los tres concejales se citaron, además de con los representantes del movimiento vecinal, con imanes magrebíes de la zona. En esta misma línea, el Ayuntamiento se reunirá próximamente con líderes subsaharianos para evitar ciertos "comportamientos incívicos" que generan malestar entre los vecinos.

"Este es el primer contacto para arreglar los problemas convivenciales y esperamos que se traduzcan en acciones concretas en las próximas semanas", confió el concejal de Seguridad Ciudadana, Tomás del Hierro. Tal y como explicó el edil, los líderes religiosos confirmaron al equipo de Gobierno municipal que se pondrán "a su disposición" para conseguir la conciliación en el barrio.

La intención municipal es emplear la mediación como una herramienta para solucionar las dificultades en la convivencia. Para ello, a lo largo de la próxima semana -aunque la fecha permanece aún sin concretar-, estos concejales se reunirán nuevamente con los líderes religiosos del barrio así como con hosteleros de las calles Hernani y Dos de mayo, entre otras, para intercambiar posturas acerca de algunos comportamientos que resultan molestos para los vecinos. "Queremos mantener el contacto con ellos y seguir trabajando a ver si entre todos vamos rebajando las polémicas convivenciales", añadió.

Reunión vecinal Dentro del mismo plan para solventar los problemas convivenciales, el Consistorio se reunió con los vecinos en un encuentro que transcurrió "con normalidad". "Ha ido bien: nos han pedido una serie de cuestiones y nosotros les hemos explicado los motivos de algunas actuaciones. Hemos tratado las diferencias entre conflictos y problemas de convivencia y, finalmente, hemos llegado a unos compromisos", expuso Del Hierro. Entre ellos, destaca el de mantener el dispositivo policial en la zona. "Policías uniformados, la Unidad Canina, la Antidrogas, la comisaría y policía administrativa, además de la colaboración con la Ertzaintza para trabajar en la zona", enumeró el edil. "Vamos a seguir trabajando por la vía policial pero también queremos iniciar la de la negociación y la de la intermediación de convivencia", añadió Del Hierro, una idea compartida por los vecinos, según indicaron.

Por su parte, los representantes vecinales reconocieron que el encuentro fue positivo, "han mostrado voluntad de diálogo", y solicitaron al Ayuntamiento que controlen el trabajo de las ONG en el barrio, ya que "son las que se benefician de esta situación y de las subvenciones", sentenciaron.