BILBAO. El Gobierno español autorizará en el plazo de 20 días la circulación de autobuses de dos pisos por las calles de Bilbao, tras dos años de gestiones administrativas para cambiar la normativa. El concejal de Circulación, Ibon Areso, confesó ayer que "pensábamos que iba a ser un proceso rápido, pero la tramitación entre los diferentes ministerios se ha prolongado durante todo este tiempo sin que desde el Consistorio hayamos podido hacer nada". A finales de este año o primeros de 2011 se incorporarán dos unidades en la línea que cubre la Peña-Sagrado Corazón.
En los próximos días, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, presentará el acuerdo alcanzado entre los ministerios de Interior, Industria y Fomento para modificar la altura de los autobuses al consejo de Ministros y, tras su aprobación, se publicará en el Boletín oficial del Estado. A partir de ese momento, los autobuses de dos pisos se podrán matricular y, por tanto, podrán circular por las calles de cualquier ciudad del Estado. Bilbao puede ser la primera ciudad en utilizarlos, según opinó el delegado de Circulación y Transportes.
El área de Circulación ya había preparado los pliegos para la contratación de los nuevos autobuses en previsión de que finalmente se llegara a un acuerdo a primeros de año, con lo que los dos nuevos autobuses podrían incorporarse a las calles de las ciudad dentro de diez meses. El coste de estos vehículos ronda los 350.000 euros; por lo que, dada la situación económica actual, en un principio sólo comprarán dos unidades para reflotar la línea 56 que une La Peña con el Sagrado Corazón, una de las más saturadas. En un futuro puede que se incorporen en otros recorridos.
antecedentes El Área de Circulación se decidió a recuperar los autobuses de dos pisos en 2007 cuando el balance de datos de usuarios puso al descubierto la saturación de algunas líneas. Además, la incorporación de estos autobuses de doble piso tenía la doble finalidad de recuperar ese aire romántico de los antiguos trolebuses que circularon por Bilbao con electricidad hace años.
Sin embargo, el Área se encontró con las limitaciones del reglamento general de vehículos que establece que la altura máxima de los autobuses no puede exceder los cuatro metros. Este límite no es sólo en el Estado español sino también en otras capitales europeas que han incorporado estos autobuses a sus servicios de transporte. Cada ciudad ha resuelto este asunto de una forma distinta. En Berlín se solicitaron permisos especiales mientras que en Londres se produjo una modificación de la ordenanza. En Bilbao, el único autobús de dos pisos, el turístico, carece de techo, lo que le permite respetar la altura.
Para solucionar este asunto, el grupo del PNV en el Congreso de los Diputados presentó una proposición para modificar la ley en lo que respecta a la altura de los vehículos, proposición que fue aprobada por unanimidad. En la propuesta nacionalista se planteaba que los autobuses pudieran tener una altura de 4,5 metros en los lugar de los 4 actuales. Finalmente, se ha aprobado una altura de 4,15 metros de altura. Tendrán plataforma baja, sin escalones salvo los obligados para subir al segundo piso. También contarán con rampas de acceso para sillas de ruedas y además incorporarán el sistema oral para invidentes como el resto de la flota. Podrán trasladar hasta 125 viajeros, de los que un mínimo de 65 irán sentados.
Satisfechos con bilbobus Areso dio a conocer este asunto al presentar los datos de la encuesta realizada entre los usuarios de Bilbobus. El perfil de la persona usuaria media de Bilbobus corresponde a una mujer (66%) de 31 a 64 años (60%) y trabajadora por cuenta ajena (57%). La mitad de las personas encuestadas dispone de carné de conducir, y el 82% de éstas declara que podría realizar su desplazamiento en automóvil particular, lo que respalda la buena nota que recibe Bilbobus que supera con notable la encuesta de satisfacción de 2009.
Durante el año pasado, Bilbobus transportó a un total de 25.754.505 personas, lo que supone, a pesar de la crisis, un retroceso en el número de personas usuarias de "tan sólo" un 0,96%respecto a 2008.
Uno de los motivos de esa reducción es la disminución de los viajes por trabajo, que pasan del 58% en 2008 al 50% en 2009. Se mantienen sin cambios los porcentajes relativos a desplazamientos por asuntos personales (19%) y estudios (8%), incrementándose de forma notable los desplazamientos por ocio (8%, en 2008, y 16%, en 2009). El 93% de las personas usuarias es cliente de Bilbobus desde hace más de dos años. De ellos, el 63% lo usa cinco o más días.