- Damien Inglis lleva unos pocos días en Bilbao y ya se atreve a decir algunas palabras en español, no en vano fue uno de los idiomas que aprendió en su escuela de la Guayana francesa. “En un par de meses, espero hablarlo bien”, comentó en su presentación un jugador que solo piensa “en el siguiente partido” y que no hace planes de futuro más allá de lo que queda de temporada, que es lo que ha firmado por el Bilbao Basket. Es su décimo equipo. “No llevaba la cuenta, pero tampoco importa demasiado”, aseguró. En el vestuario de Miribilla, podrá expresarse en su idioma natal ya que coincide con Valentin Bigote y Jonathan Rousselle. De hecho, con el capitán también compartió equipo en el Limoges hace tres temporadas.

“Que ellos estén aquí ayuda a hacerlo todo más fácil, está claro, pero sin ellos también habría venido. Quería jugar fuera de Francia y la ACB es la mejor competición de Europa”, señaló. Por eso, estaba sin equipo tras ganar la Eurocup con el Mónaco la pasada temporada. “Todo el mundo conoce al Bilbao Basket, tiene un nombre en Europa. Cuando recibí su llamada, era la opción que estaba esperando”, añadió Inglis, que sabe que llega a una liga en la que hay muchos jugadores de su país, aunque no quiso compararse con ninguno. Su debut en Valencia fue satisfactorio, “aunque lógicamente noté que me falta ritmo. Pero hicimos una gran primera parte y me gustó volver a estar en cancha y con chicos que me han recibido con los brazos abiertos. Estos días quiero encontrar ese ritmo para poder ayudar al equipo”.

Damien Inglis es un jugador que puede aportar en varias facetas a un equipo “al que no le falta talento”. El de la Guayana ha ido sumando experiencias valiosas en su carrera y una de ellas fue una corta etapa en los Milwaukee Bucks, donde coincidió con Giannis Antetokounmpo. “La convivencia me sirvió para entender que el trabajo es lo más importante, tienes que hacerlo lo más duro posible y tratar de que los demás sigan tu ejemplo ”, afirmó el nuevo jugador del Bilbao Basket.