"Hay que intentar disfrutar un poco más porque todo va demasiado deprisa"

bilbao. El Bilbao Basket sigue a la espera de novedades en cuanto al futuro del proyecto que quizás se desvelen hoy en la rueda de prensa que ofrecerá Gorka Arrinda en la sala de prensa del Bilbao Arena. Mientras no se aclare todo, los rumores continúan y ayer la prensa se hacía eco del posible interés del Partizan por incorporar a Dairis Bertans. El conjunto de Belgrado busca refuerzos para el Top 16 de la Euroliga y el fichaje del letón encajaría porque, además, en el Partizan milita su hermano Davis, aunque ahora está lesionado. Además, Dairis Bertans es el único jugador por el que el Bilbao Basket podría hacer caja, ya que tiene una cláusula de salida de medio millón de euros.

El tiempo pasa, con el entorno del club cada vez más alterado, y con los profesionales cumpliendo con su cometido, lo que les coloca mañana ante el Iberostar Tenerife en un partido importante para no peder distancia respecto a los puestos de play-off, ahora que la Copa está prácticamente imposible. En este duelo, Raúl López alcanzará su partido 350 en la Liga ACB, una cifra que en otras circunstancias merecería ser destacada, pero tampoco el carácter del base de Vic es dado a estas celebraciones individuales. "No suelo pensar mucho en esas cosas. Está claro que llevo mucho tiempo jugando en la ACB y alcanzo una cantidad de partidos importante. Estoy muy contento de poder seguir jugando", comenta Raúl a la web del club.

Su debut ocurrió en la temporada 1997-98 en las filas del Joventut y des entonces ha militado en el Real Madrid, el Akasvayu Girona y el Bilbao Basket dentro de la competición. "Estoy contento de haber estado en todos los equipos por los que he pasado, he conocido a gente y me quedo con todo ello", apunta un jugador que, con la perspectiva del tiempo, recomendaría a aquel Raúl López que se estrenó con 17 años en la Penya "que se lo tomara con más calma". "Hay que intentar disfrutarlo de todo un poco más porque va todo demasiado deprisa", asegura.

Raúl López se ha convertido en un ídolo para la mayoría de la afición del Bilbao Arena, aunque es algo que también quiere relativizar el jugador catalán: "No soy consciente de esto porque significaría que piensas mucho en ti mismo y no es algo que yo haga mucho. Está claro que también he sido joven y me fijaba en jugadores que me gustaban. Está claro que la afición al baloncesto en Bilbao está creciendo, es normal que nosotros seamos la referencia para algunos chavales y eso muy bueno".