Javier Clemente respondió ante los micrófonos de Onda Vasca a las graves acusaciones vertidas por Manu Sarabia en su autobiografía titulada Chaval, ¿quieres venir al Athletic?, en la que denuncia acoso laboral por parte del que fuera su entrenador en el club bilbaino hace casi cuatro décadas. “Me da pena por él, porque no tiene sentido lo que dice. Me da pena que muchos puedan decir que es un poco tonto”, dijo el de Barakaldo, que añadió con sarcasmo: “Voy a comprar el libro no por lo que dice, para que saque un duro”.

Clemente prosiguió con su versión: “Está sembrado. O se le ha ido la pinza o está de cachondeo. El mobbing en esa época ni existía. Mobbing igual llama a cambiarle de posición en algún partido. Dejé de ponerle al final de su carrera, que físicamente estaba peor. Nos empezamos a llevar mal cuando no le ponía de titular, que es lo que él quería”.

El exentrenador del Athletic concluyó diciendo que Sarabia “ha cumplido lo de plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. Le faltaba el libro y como estará aburrido se ha dedicado a escribir el libro. Las tonterías que ha dicho…”.

En el libro escrito por Sarabia junto a su mujer, Begoña Armesto, el exjugador asegura que “Clemente lo intentó todo: que me traspasaran, quitarme de las alineaciones o provocarme para que le pusiera mi salida del club en bandeja; trató de enemistarme con mis compañeros, de multarme o de socavar el apoyo que recibía por parte de la afición y de los medios de comunicación con sus acusaciones o insinuaciones. Él quería que yo respondiera a sus provocaciones para echarme, buscaba una excusa, pero no me dejé machacar. No tragué sus arbitrariedades ni su abuso de poder”.

Y ahonda: “Durante cuatro temporadas fui víctima de acoso laboral. Un conflicto que me colocó en el ojo del huracán, que unió mi nombre a la mayor crisis de la historia del club e hizo que la palabra ‘polémica’ se vinculara a mi carrera futbolística”, recuerda Sarabia, que asegura que vivió “un infierno” mientras el club vivía una época plagada de éxitos.

Sarabia desarrolla a lo largo de más de veinte páginas su perspectiva sobre lo acaecido. “Durante 38 años he seguido a rajatabla la decisión que tomé de no hablar de aquello y, sobre todo, de no responder a continuas provocaciones recibidas de Clemente en estos años. No vivo de la bronca y la polémica, no es mi estilo, y no he querido retroalimentar al personaje, pero soy consciente de que el silencio me ha hecho daño”, reflexiona.

En este sentido, Sarabia explica que el impulso a desvelar ahora su experiencia se debe a “cosas que he leído y oído en los últimos tiempos”, hechos que “han tenido mucho que ver con mi cambio de decisión”. “Declaraciones en las que me califica de medio golfo, de mala persona y de mal compañero o de acabar con el fenomenal ambiente que había en el equipo campeón”, prosigue.

Por ello, a su entender, “era momento de poner negro sobre blanco todo lo que pasó. En mi opinión, durante aquellos cuatro largos años, fui víctima de acoso laboral por parte de Javier Clemente. Viví una situación abusiva, de acoso por su parte. Un sinsentido que me produjo un gran desgaste psicológico que pudo haberme hundido”.