"Un dolor de muelas para cualquiera". Así catalogó Ernesto Valverde al Mallorca de Javier Aguirre en la previa de un partido en el que el verdadero dolor de muelas para el rival fue Yuri Berchiche. El lateral del Athletic, protagonista de la semana en la sala de prensa de Lezama, lo fue también en San Mamés en un envite que se encargó de resolver por la vía rápida. Sus dos zarpazos, sendas obras de arte con mención especial para el primero de ellos, quedaron registrados en los minutos 2 y 16 para dejar tocado y prácticamente hundido al conjunto bermellón. Llegaron los goles antes que las ocasiones propiamente dichas para satisfacción y alivio de Valverde, que el año pasado vio cómo sus futbolistas se estrellaban una y otra vez contra el muro mallorquín en el primer compromiso liguero.

No se repitió anoche el guion gracias a la lucidez de un inconmensurable Berchiche, quien batió por partida doble al serbio Rajkovic con dos remates de categoría que sirvieron para levantar de sus asientos al respetable. No se vieron pañuelos blancos en las gradas, pero el primer tanto bien los mereció. Colgó el balón al área en una lejana falta lateral Nico Williams y el zarautztarra, en un escorzo inverosímil de espaldas a portería, cantó bingo para poner el 1-0 en el marcador. El gol, para el recuerdo, fue celebrado por todo lo alto por el ‘17’ del Athletic, quien repitió como goleador poco después en otra jugada de estrategia.

A la salida de un córner botado también por Nico Williams, previa prolongación de Gorka Guruzeta hacia atrás de tacón, volvió a encontrar la portería bermellona Berchiche, quien adaptó el cuerpo a la perfección para conectar un preciso e inapelable disparo con el pie derecho en alto ante el que nada pudo hacer Rajkovic. Volvió a celebrar con entusiasmo su diana el guipuzcoano, que se convirtió en el primer defensa del Athletic en firmar un doblete en liga desde que lo lograra Asier del Horno frente al Real Madrid en el curso 2003-04.

El antiguo San Mamés fue testigo entonces, un lejano 20 de marzo de 2004 con Valverde también en el banquillo, de los dos goles con los que el lateral de Gallarta certificó la victoria por 4-2 ante el cuadro blanco que dirigía Carlos Queiroz. Otro defensa, Andoni Iraola, logró otro doblete tres años después en una visita a la Real Sociedad que el Athletic sacó adelante por 0-2, pero lo hizo jugando como centrocampista con Ander Murillo como aliado en la zona ancha. Berchiche, que nunca había marcado dos goles en un partido de Primera División, se adjudicó ante el Mallorca el primer doblete en sus 229 encuentros en la máxima categoría y el tercero en 354 encuentros como profesional tras conseguirlo también con el Eibar en Segunda División en la temporada 2013-14 y con el Athletic en la campaña 2019-20, cuando marcó dos goles ante el Sestao River en Copa.

“Me encuentro bien, sin la energía quizá de otros años, pero soy otro tipo de jugador y he aprendido a defender mejor”, declaró el miércoles el de Zarautz en Lezama, donde apenas quiso referirse a su situación contractual pese a finalizar contrato el próximo 30 de junio. “No he hablado con el club. Sé que hay una cláusula de renovación automática por partidos, pero no le doy importancia. El club sabe que estoy contento y la idea es seguir aquí”, remarcó Berchiche, que se erigió en el gran protagonista ante el Mallorca.

DOS GOLES “SIN QUERER”

Al término del partido, el lateral rojiblanco confesó que “los dos goles han sido sin querer”. “En el primero he ido a prolongar la jugada y cuando me he dado la vuelta he visto que el balón estaba dentro de la portería. De hecho, al verlo lo primero que he pensado es que era fuera de juego. Los chavales son muy listos y saben que los dos goles han sido sin querer, pero valen igual y muy contento”, agregó el guipuzcoano, quien se mostró “consciente de que el gol que encajamos en Valencia fue un error mío y el primero que recibimos en Copa contra el Barcelona, también. Hay días que no te salen las cosas, esta vez ha salido cara y me voy muy contento a casa”.

Respecto a las quejas del Atlético por los dos días menos de descanso que tendrá para afrontar el primer asalto de la semifinal de Copa, Berchiche fue tajante: “No entendemos esas quejas, porque el año pasado nos pasó a nosotros lo mismo y no nos quejamos”.