L tramo inicial de la temporada, complicada en todos los aspectos para el Athletic, inmerso en una palpable y preocupante crisis deportiva e institucional, está resultando también difícil a título individual para Ibai Gómez, fuera de combate desde que sufriera una dolorosa fractura de la clavícula derecha el pasado 19 de agosto en Lezama. El de Santutxu, que aspiraba a dar un paso al frente durante la pretemporada en busca de un mayor protagonismo a las órdenes de Gaizka Garitano, cayó lesionado tras la primera semana de entrenamientos y aún no ha podido disponer de minutos en medio de un delicado escenario en el que ha visto multiplicada su competencia.

Primero fue la irrupción de Jon Morcillo, el rojiblanco más productivo en los amistosos estivales, quien elevó la exigencia en la búsqueda de un puesto de titular como extremo en un equipo al que, además, ha llegado Álex Berenguer con el cartel de presumible titularísimo para Garitano. El navarro, fichado con la idea de que ocupe la banda izquierda del ataque rojiblanco, si bien puede actuar en cualquier posición ofensiva e, incluso, en ambos laterales, sitúa a hombres como Iñigo Córdoba, Iñigo Lekue, Iñigo Vicente, Óscar de Marcos y el propio Ibai en una complicada tesitura. Conocido es, no en vano, el firme objetivo de Ibai de tener un mayor protagonismo sobre el césped que la pasada temporada, en la que tuvo que conformarse con participar en diecisiete partidos de liga y tres de Copa, siendo titular solo en seis encuentros correspondientes al campeonato de la regularidad y dos en el torneo del K.O, en el que marcó su único gol desde que regresó al Athletic en enero de 2019 al castigar al Intercity en primera ronda.

Un año después, en la recta final de su recuperación y con la intención de recuperar el terreno perdido desde su salida del Alavés, donde ofreció un notable rendimiento al calor de una continuidad de la que no ha gozado desde que arrancó su segunda etapa como león, el nuevo portador del dorsal 7 del Athletic se halla en una delicada situación deportiva al carecer hasta la fecha de la confianza de Garitano. El técnico, pese a alabar públicamente sus cualidades en más de una ocasión, relevó a Ibai a un segundo plano el pasado curso y está por ver el rol que le asigna a lo largo de un ejercicio ya en marcha.

contrato hasta 2022

Ante la falta de minutos y oportunidades, el atacante rojiblanco, con contrato hasta el 30 de junio de 2022, estuvo cerca de recalar en el Espanyol durante el último mercado invernal y su nombre volvió a figurar junto al de otros jugadores con opciones de salir del equipo en una ventana estival que se cerró el lunes. Rafa Alkorta, cuestionado el martes en rueda de prensa por la situación de Ibai, señaló que "tiene contrato y tendrá más oportunidades de demostrar lo buen jugador, gran profesional y buen chico que es. Va a tener partidos, seguro. Le está pasando de todo, no le están saliendo las cosas bien, pero va a acabar ayudando sin duda".

Así de convencido se mostró el director deportivo del Athletic sobre el papel que puede desempeñar el vizcaino en un equipo en el que la titularidad en los costados está más cara que nunca. Al menos, por el número de candidatos a dos puestos. En la izquierda, por orden, Berenguer, Morcillo, Córdoba e, incluso, Muniain están por delante de Ibai, con Iñigo Vicente en un presumible escalón inferior, mientras que en la derecha, con Williams como primera opción desde la aparición de Raúl García como delantero centro, el de Santutxu tiene a De Marcos, Lekue y quién sabe si al polivalente Berenguer como principales competencias por una plaza como titular. Ibai, por tanto, se halla en medio de un complejo desafío.

Ibai, fuera de combate desde la lesión que sufrió el pasado 19 de agosto, ha visto aumentada la competencia en las bandas

"Le está pasando de todo, no le están saliendo las cosas, pero va a acabar ayudando sin duda", lanzó Alkorta el martes