LOS días van pasando de manera irremediable en Marienfeld, el lugar escogido por la dirección deportiva para el particular retiro veraniego del Athletic, que trabaja a destajo con un único objetivo entre ceja y ceja: llegar de la mejor manera posible al estreno liguero del próximo 16 de agosto contra el Barcelona. El plan previsto por Gaizka Garitano y el resto del cuerpo técnico sigue su curso sin más contratiempos que las molestias que aún arrastran Iñigo Martínez e Iñigo Lekue; mientras que los dos últimos en llegar, Unai Núñez y Unai Simón trabajan ya al mismo ritmo que el resto de sus compañeros. A ellos podría unirse en los próximos días el central de Ondarroa, quien en la mañana de ayer ya se ejercitó con balón, algo que aún no ha podido hacer Lekue, si bien parece que avanza en su recuperación sin mayores problemas.

Tras la triple sesión del lunes, el equipo realizó ayer entrenamiento con balón por la mañana y el trabajo físico quedó para la tarde, cuando el calor fue algo más suave, si bien lo peor está aún por llegar, pues tanto hoy como mañana y el viernes los termómetros se dispararán hasta los 37 grados.

Garitano quiere hacer sudar a los suyos y ayer lo consiguió por ración doble. En la sesión matinal, el balón adquirió todo el protagonismo y el técnico estuvo muy encima de la plantilla. “¡Hay que defender, hay que defender, que no te hagan gol!”, espetó a los suyos en más de una ocasión, poniendo el foco en los defensas en los primeros ejercicios del día. Después, el trabajo grupal se centró en distintos ejercicios de centros y remates que dejaron imágenes y momentos curiosos, como el lamento de Iker Muniain por fallar un gol que parecía cantado y una posterior celebración tras marcar un tanto complicado.

Otro de los aspectos en los que hizo mucho hincapié Garitano fue en la circulación del balón en los distintos partidillos de entrenamiento que organizó. Muy pendiente siempre de cada detalle, por mínimo que este fuera, los gritos de ánimo hacia sus pupilos fueron también una constante en la calurosa matinal de Marienfeld.

El trabajo físico fue cosa de la tarde, cuando el calor bajó unos cuantos grados su intensidad, aunque lo peor aún está por llegar. De la sesión vespertina se ausentó Iñigo Lekue, que trabajó en el gimnasio en solitario. Iñigo Martínez y Unai Núñez, por su parte, sí completaron el entrenamiento sobre el césped, aunque buena parte del mismo lo realizaron por su cuenta.

Sesión matinal y tarde libre Después de dos intensos primeros días en tierras germanas, la plantilla rojiblanca tendrá hoy la tarde libre, que seguramente aprovecharán para acercarse a alguna localidad cercana para salir así de la rutina en la que están inmersos desde que llegaron a Marienfeld en la noche del domingo.

Por la mañana, eso sí, tendrán trabajo, aunque está previsto que realicen una sesión bastante más liviana que las llevadas a cabo hasta la fecha, con juegos para soltar piernas.

El balón volverá a estar presente en alguna de las tres sesiones previstas para mañana, en la que se repetirá el modus operandi del lunes: carrera continua a primera hora de la mañana, en torno a las 8:30 horas, desayuno, entrenamiento a las 10.30 horas y una nueva sesión a la tarde.

Está por ver si para entonces Iñigo Martínez o Iñigo Lekue se reincorporan al trabajo grupal. Es posible que el central pueda realizar parte de los ejercicios con balón junto al resto de sus compañeros, pues ayer mostró síntomas de aparente normalidad en los golpeos con el balón, aunque habrá que esperar. El caso de Lekue parece bastante más complicado.