El Athletic solicita jugar el primer partido de la próxima Liga como visitante
El club rojiblanco pretende así que el exilio puntual a Anoeta se dé en un máximo de dos jornadas
Bilbao. El Athletic ya hace cálculos. Se trata de que la transición entre el viejo San Mamés y el nuevo tenga el menor impacto posible para el socio. Los plazos de la primera fase de construcción se echan encima y la sociedad propietaria del estadio -formada por Athletic, Diputación Foral de Bizkaia, Gobierno vasco, BBK y Ayuntamiento de Bilbao- confía en que las obras no sufran retraso alguno, por lo que el futuro campo abriría sus puertas, con tres cuartas partes edificadas, a mediados del próximo mes de septiembre.
A menos de cuatro meses vista de su inauguración, el Athletic no quiere pillarse los dedos y, en este sentido, ha solicitado a la Federación Española de Fútbol (FEF) que haga una excepción a la hora de imponer los criterios del sorteo del calendario de la Liga BBVA 2013-14, que tendrá lugar durante la Asamblea General de la FEF a inicios de verano. En concreto, la Junta Directiva presidida por Josu Urrutia reclama que el conjunto rojiblanco dispute la jornada inaugural, fechada para el 18 de agosto, como visitante, con lo que se reduciría el número de encuentros que el Athletic debiera jugar fuera de Bilbao como local, siempre y cuando el equipo dirigido aún por Marcelo Bielsa no logre billete, opción muy complicada, para la Europa League.
La entidad bilbaina se muestra confiada en que la Federación Española de Fútbol admita sus argumentos, ya que "es un caso excepcional y comprensible a la vez", según apuntan fuentes consultadas por DEIA, que, al mismo tiempo, consideran que "es algo lógico en el objetivo de dañar lo menos posible los intereses del Athletic y los del club que nos ceda el campo", en referencia a la Real Sociedad.
Es decir, el Athletic no solo ha pedido ese detalle por parte de la FEF, sino que este ofrece una segunda variante, que afecta a la Real Sociedad. Así, el conjunto donostiarra, que lucha en las dos jornadas que restan de la presente Liga por blindar su actual plaza de Champions, debería estrenar la próxima Liga en Anoeta, lo que permitiría a los leones disponer del feudo realista durante ese exilio forzado y puntual.
Antecedente
Los cálculos son sencillos. La próxima Liga arrancará el 18 de agosto, un mes antes de la fecha prevista para la inauguración del nuevo San Mamés. Si el Athletic empezara como visitante, se estrenaría ante los suyos una semana después, con la Aste Nagusia en su tramo final, y lo haría en Anoeta, con capacidad para 32.000 espectadores. Un traslado a Donostia que se repetiría 14 temporadas después de que los rojiblancos jugaran también como locales en la capital guipuzcoana el 6 de abril de 1997 ante el Sevilla (0-0), entonces debido al cierre de La Catedral por culpa del botellazo que recibió cuatro semanas atrás el austríaco Otto Konrad, portero del Zaragoza.
La tercera jornada de la próxima Liga tendrá lugar el 1 de septiembre, supuestamente el segundo encuentro de los leones como visitantes, mientras que una nueva comparecencia como local se alargaría hasta el 15 de septiembre, una vez que el fin de semana anterior se producirá el primer parón liguero por los compromisos internacionales -días 6 y 10 de ese mismo mes- de las selecciones inmersas en la fase de clasificación al Mundial de Brasil de 2014.
Las previsiones iniciales apuntan a que el nuevo San Mamés estará listo para mediados de septiembre, por lo que acogería el compromiso del Athletic en la cuarta jornada de Liga. En caso de que los plazos vayan más allá en el tiempo, los rojiblancos deberían repetir en Anoeta, una doble posibilidad que la Junta Directiva de Josu Urrutia ya ha consultado con los rectores de la Real Sociedad, que no pondrían dificultades al traslado de los bilbainos.
Entradas
Por otra parte, el Athletic pondrá mañana, viernes, a la venta los pocos miles de entradas disponibles para el último encuentro oficial que acogerá el viejo San Mamés, el domingo ante el Levante. Un billetaje destinado a los socios Barria, mientras que las taquillas se abrirán el sábado al público si quedaran localidades.