lezama. Si Marcelo Bielsa barajaba la reaparición de Iñigo Pérez como una de las soluciones para compensar las bajas de Ander Herrera y Oscar De Marcos, deberá ir pensando en otra alternativa. El zurdo tuvo que retirarse aquejado de unas molestias musculares derivadas de patologías previas, tal como informó el club en su página web y, a la espera de las pruebas médicas que le realicen hoy, se puede adelantar que no se halla en condiciones de ser incluido en la lista de convocados para el Santiago Bernabéu. Esta noticia supone el agravamiento de una situación de por sí compleja, pues ni la plantilla del Athletic se distingue por disponer de un número elevado de centrocampistas, ni la visita al Real Madrid sería la idónea sobre el papel para experimentar en el eje del equipo.
Iñigo Pérez sólo aguantó unos pocos minutos sobre el césped donde participaba en un partidillo contra jugadores del Bilbao Athletic. Por los gestos que hizo, sintió algún impedimento de tipo muscular para seguir trabajando y tomó el camino de los vestuarios. A expensas del parte definitivo, vuelve a ingresar en una enfermería que prácticamente no ha abandonado en los últimos dos meses. Había jugado de seguido desde el verano hasta que a principios de septiembre sufrió un problema en un tobillo que le supuso perderse seis encuentros. Tras reaparecer en Mestalla, de nuevo tuvo que coger la baja por un tema muscular. Durante la semana pasada se juzgó precipitada su vuelta de cara al partido con el Sevilla y este martes ya trabajó con el resto de sus compañeros. Ayer volvió a lesionarse.
Con la recuperación de Iñigo Pérez, el técnico resolvía parcialmente el lío que en este equipo puede plantear no contar de repente con dos fijos que juegan en la línea de medios. Sin él disponible, el asunto va a requerir mover de sitio a alguien. El número de efectivos con que, en principio, cuenta el entrenador para cubrir tantas ausencias concentradas en torno al círculo central es muy corto. No se puede olvidar que Iñigo Ruiz de Galarreta está descartado para lo que queda de temporada, aunque cuando estuvo apto apenas contó, incluso estando Herrera de baja. Y no hay más medios en el grupo, en todo caso jugadores que pueden amoldarse a labores que normalmente no desarrollan.
varias opciones Ahora, con vistas al choque con el Madrid, aparte del único titular disponible, Ander Iturraspe, no hay más centrocampistas. Sin recurrir al filial, donde al contrario que en el primer equipo abundan los jugadores específicos de la zona ancha, Bielsa no tiene más remedio que echar mano de gente que en algún momento ha ejercido de centrocampista. De todos ellos, por experiencia o trayectoria, el primero a considerar sería Carlos Gurpegi, pero además estarían Mikel San José, Andoni Iraola, Gaizka Toquero e Iker Muniain.
Solo el primero de ellos es un medio con todas las letras pese a que este año aparezca como habitual en la demarcación de central, posición que por cierto conoce desde la etapa de Ernesto Valverde. Gurpegi ha sido mediocentro casi siempre en su dilatada carrera, pero a Bielsa le gusta su rendimiento más atrás y quizás por eso prefiera no moverle para un partido suelto. San José, medio de cierre en categorías inferiores, tendría más boletos que el capitán para acompañar a Iturraspe, que con uno o con otro al lado se vería obligado a desplazarse unos metros hacia adelante.
Atendiendo al número de veces en que ha desempeñado esta tarea, el tercer hombre sería Muniain, cuyo encaje vendría favorecido por el corte más defensivo de los otros dos, de forma que habría un mayor equilibrio, especialmente para realizar la labor defensiva. Toquero también ha probado en dos o tres oportunidades sin resultados satisfactorios, en la línea por tanto de Muniain. Iraola, por su parte, ha jugado en la media ratos sueltos y por necesidades muy concretas, por ejemplo al quedar el equipo en inferioridad numérica. Sí fue medio, de urgencia, en el inolvidable curso que dirigió Mané y aptitudes no le faltan, pero su elección conlleva la búsqueda de un lateral. Otro lío porque siempre juega él.
Vistos el panorama y los precedentes, no extrañaría la reunión de Iturraspe, San José y Muniain. El equipo estaría más protegido en teoría, lo cual no suele estar de más en el ingrato Bernabéu, donde los marcadores tienden a abultarse. A falta de medios, Bielsa pudiera decantarse por poner tres centrales, que de eso va sobrado, hasta tiene a Borja Ekiza de nuevo, pero José Mourinho acostumbra a sacar un único ariete en sus alineaciones. El enorme potencial ofensivo del Madrid, la pegada que exhibe al calor de su afición, marca inevitablemente toda previsión en torno a la cita del sábado. Hace un año en este mismo escenario, Iraizoz recibió cuatro y eso que el Athletic marcó primero y fue mejor durante dos terceras partes del encuentro.