BARCELONA. Las condiciones de seguridad de la planta de IQOXE, que acumula cuatro sanciones por incumplir la normativa, centran la investigación sobre las causas de la explosión en la petroquímica de Tarragona para determinar si las muertes que provocó pueden constituir homicidio imprudente, lo que ha llevado a los Mossos d'Esquadra a registrar su sede y la zona cero.

El titular del juzgado de instrucción número 1 de Tarragona, que ha abierto diligencias sobre la explosión del pasado martes en Industrias Químicas del Óxido de Etileno (IQOXE), así como la Fiscalía, están a la espera de que los Mossos d'Esquadra y la Inspección de Trabajo le remitan los informes completos sobre las causas de la explosión y las circunstancias del accidente.

Por el momento, Inspección de Trabajo ha desvelado que IQOXE ha recibido en los últimos años cuatro sanciones, de entre 2.000 y 8.000 euros, por incumplimiento de la normativa en materia de salud y seguridad laboral.

El conseller de Trabajo, Ckakir el Homrani, ha asegurado que Inspección de Trabajo irá "hasta el fondo" en su investigación para aclarar las "causas y las responsabilidades de un accidente muy grave" en la planta química de La Canonja (Tarragona), que ha causado tres muertos y siete heridos.

En el marco de las investigaciones, los Mossos han registrado esta tarde la sede administrativa de la empresa en El Prat de Llobregat (Barcelona) para recabar documentación, así como la zona cero de la factoría, a instancias del juzgado que ha abierto diligencias.

Además de las investigaciones policiales y judiciales, los Bomberos de la Generalitat comenzarán a priori esta noche el trasvase, con "todas las garantías" y "seguridad", de los productos químicos del depósito a las cisternas, un proceso lento debido a la afectación de las instalaciones tras la explosión y en el que trabajan una cuarentena de personas.

Según han informado a Efe fuentes de la Fiscalía de Tarragona, por el momento el juez ha recibido solo los primeros atestados de los Mossos, que informan de los tres muertos y los siete heridos por la explosión, originada en el tanque del reactor de la planta que IQOXE tiene en el polígono sur de la ciudad.

Una vez disponga de los informes de los Mossos d'Esquadra y de Inspección de Trabajo, la Fiscalía podría solicitar al juez nuevas diligencias para determinar si las medidas de seguridad laboral eran las adecuadas, si se actuó con "diligencia" en la manipulación de las sustancias implicadas en la explosión o si, por ejemplo, se impuso un ritmo de producción superior al que podía asumir la planta.

En caso de negligencia, según fuentes de la Fiscalía, la investigación judicial abierta, que hasta el momento no concreta qué ilícito penal se indaga, podría seguir su curso por delitos de homicidio imprudente, al menos por la muerte de los dos trabajadores de la planta.

En la causa judicial abierta se deberá hacer una evaluación de los daños materiales generados por la explosión, que alcanzaron a edificios e infraestructuras situados fuera de la petroquímica, entre ellos el piso parcialmente derrumbado por la onda expansiva de la explosión que causó la muerte de una tercera persona en el barrio de Torreforta.

Aunque aún se está a la espera de los informes definitivos sobre el accidente químico, la Fiscalía de Tarragona no cree que por el momento se pueda abrir una investigación por delito contra el medio ambiente, puesto que no hubo vertidos por parte de la empresa ni consta que el siniestro causara emisiones tóxicas.

Los Mossos d'Esquadra, que han interrogado ya a varios testigos, han recibido decenas de avisos sobre restos de la explosión que salieron volando de la zona petroquímica y que impactaron en varios puntos de los alrededores, sin que por el momento se tenga constancia de más daños personales que el fallecido en Torreforta.

Paralelamente, la química IQOXE ha anunciado que ha encargado al Instituto Químico de Sarrià (IQS) una investigación independiente del accidente y ha insistido en que siguió los protocolos de seguridad.

En un breve comunicado, la compañía, propiedad del grupo industrial Cristian Lay, ha destacado que el IQS "es un centro universitario y de investigación de referencia internacional en el sector químico" y que ahora se encargará de realizar una "investigación independiente que permita esclarecer los motivos de la explosión de una de las cuatro plantas de la factoría".

La empresa ha insistido en que, "en la medida que las difíciles circunstancias del momento lo permitieron, siguieron los protocolos de seguridad, lo que permitió la llegada de los bomberos al lugar del siniestro en tan solo unos minutos".

Por contra, la Federación de Industria del sindicato USOC ha exigido que se revisen los protocolos de actuación y comunicación de la petroquímica, ya que considera que la explosión puso de relieve "algunas carencias" en su aplicación y en la activación de las alarmas.

Uno de los operarios de la compañía heridos ha asegurado hoy que, antes de la explosión, oyó "un ruido muy fuerte, como si fuera una olla a presión, como si saliera vapor o gas". EFE