El Departamento de Educación quiere que se rompa la dicotomía secular de tener que elegir entre Universidad o Formación Profesional. Por este motivo, la Viceconsejería de FP y las tres universidades del Sistema Universitario Vasco han acordado abrir el curso que viene 75 nuevas pasarelas entre ciclos de Grado Superior a 58 carreras afines. En total, Euskadi cuenta ya con 264 de estas pasarelas que reconocen al alumnado de Grado Superior hasta el 25% de las materias de la carrera (de 3 a 66 créditos universitarios). Cabe destacar que hay muchos ciclos de Grado Superior que ofrecen este salvoconducto a más de un grado universitario. Por ejemplo, Automatización y Robótica Industrial tiene pasarelas con hasta 12 grados universitarios: Grado en Ingeniería Eléctrica (UPV/EHU); Grado en Ingeniería Electrónica Industrial y Automática (UPV/EHU y Deusto); o Grado en Ingeniería en Energía (Mondragon U.), entre otros.

“Los nuevos tiempos, así como las necesidades del tejido productivo, hacen necesario cambiar esa visión y plantear ambos estudios como complementarios entre sí”, explica a este periódico viceconsejero de FP, Jorge Arévalo, quien revela que el mes que viene los ministerios de Educación y Universidades llevarán al Consejo de Ministros el Real Decreto que regulará la pasarela de reconocimiento de estudios que posibilite que los graduados universitarios que quieran acceder a FP puedan convalidar materias por módulos de ciclos formativos, como se hace a la inversa. “Llevo años peleando por eso y ya lo hemos conseguido”, se congratula Arévalo. Según el viceconsejero, este “necesario paso” ha sido posible porque “hay una secretaria general de Formación Profesional que no solo oye, sino que escucha. Y es que, no tenía sentido que no reconozcamos los conocimientos que ha adquirido un universitario en la carrera y sí al revés”. Arévalo defiende la conjugación de ambos estudios porque “las habilidades y destrezas que desarrolla la FP y el conocimiento teórico de la Universidad hacen que el estudiante adquiera un perfil profesional muy potente”, lo cual reforzará “la empleabilidad y la competitividad de las empresas”.

DEMASIADA TEORÍA

La opinión expresada por Arévalo coincide con las conclusiones del reciente Barómetro CYD acerca de la valoración de la sociedad sobre la calidad del sistema universitario. El citado estudio señala que la universidad genera talento y competitividad, pero la mayoría de la sociedad opina que su formación es demasiado teórica. En concreto, el 81% de la ciudadanía valora la aportación de la universidad a la atracción y generación de talento, el 80% destaca su papel en la formación de profesionales en activo, el 79% está de acuerdo en su papel en la generación de líderes y un 77% cree que la universidad impulsa la competitividad.

Además, una amplia mayoría considera que la universidad contribuye al progreso social (87%) y a la formación a lo largo de la vida (86%), permite el acceso a empleos de mayor calidad (83%) y promueve la innovación y el emprendimiento (78%). Finalmente, y con valoraciones no tan positivas, un 50% cree que la universidad contribuye a la formación de desempleados.

A mayor edad y mayor nivel de estudios, mejor es la opinión sobre la contribución de la universidad en estos aspectos. Cabe destacar por último que un 70% considera que la enseñanza ofrecida por las universidades es muy teórica y poco práctica, opinión especialmente extendida entre el colectivo más joven, donde este porcentaje alcanza el 76%.

Hasta las 60.000 plazas

El 26 de mayo se cerrará el plazo de matrícula de FP para del curso 2023-2024, que alcanzará una oferta global de 59.910 plazas. Podrá realizarse de modo online (a través de la página web del Departamento de Educación) o presencial, en los propios centros de FP. El 7 de julio se publicarán las listas provisionales de personas admitidas, no admitidas y excluidas y el 13 de julio las definitivas. La formalización de la matrícula en tres fases o plazos –con un procedimiento de adjudicación de plazas en cada una de las fases– persigue el objetivo de garantizar que el mayor número de alumnos solicitantes pueda matricularse en su primera opción. Con el objetivo de que ninguna persona se quede sin plaza, el Departamento de Educación recomienda al alumnado que, al realizar la solicitud, indique al menos diez plazas, en orden de preferencia.