Suspenso rotundo de Kontsumobide a las webs de venta
El 74% de los páginas analizadas incumple la normativa que protege los derechos de los consumidores
Kontsumobide ha inspeccionado 42 webs de venta de producto en el marco de una campaña en la que ha constatado que en el 73,81% de los casos se produce algún incumplimiento de la normativa que protege los derechos de las personas consumidoras.
Según ha explicado, esta campaña de inspección, que se ha desarrollado por cuarto año consecutivo, ha arrojado datos que muestran "un pequeño retroceso" respecto a 2020, pero "aún mantiene su mejoría" respecto a 2019.
La mayoría de los incumplimientos detectados guarda relación con el ejercicio del derecho de desistimiento. De este modo, el incumplimiento más veces repetido es que no se informa a la persona consumidora que, una vez ejercido el derecho de desistimiento, se le debe devolver el importe en un plazo máximo de 14 días naturales (51,4% de los casos).
En otras ocasiones, se ha comprobado que no se facilitaba el formulario de desistimiento o no se informaba de que los gastos de devolución debían correr por parte de la parte consumidora.
27 expedientes sancionadores
La ausencia de características del producto, de la dirección del empresario o de los accesos y la información pertinente sobre los procedimientos de resolución de litigios en línea o de resolución extrajudicial, así como relacionados con la garantía, son otros de los incumplimientos constatados.
Como consecuencia de esta inspección, Kontsumobide ha propuesto la apertura de 27 expedientes sancionadores, ha apercibido a dos empresas y ha decidido dar continuidad a esta campaña de inspección.
Temas
Más en Sociedad
-
Euskadi mantiene su liderazgo en el sistema público de servicios sociales, según el índice DEC 2024
-
EHU renueva su imagen tomando como punto de partida el "concepto universal" de Chillida y "simplificando" su marca
-
El juez pide al SCS que remita la historia clínica de Yéremi Vargas al estar incompleta la que envió en 2021
-
La IA descubre que los Manuscritos del Mar Muerto son más antiguos de lo que se creía