Tarragona - Ecologistas en Acción llamó ayer a cerrar las centrales nucleares nucleares en el Estado con motivo del trigésimo aniversario del accidente de la central Vandellós I: “Es importante tener memoria y recordar lo que pasó en Vandellós para poder acabar con la energía nuclear cuanto antes mejor”. La central, transformada hoy en el Centro Tecnológico Mestral, sufrió una avería el 19 de octubre de 1989 a las 21.39 horas, que provocó una fuga de hidrógeno que acabó explotando y causando un incendio al entrar en contacto con el aire y el aceite a altas temperaturas.

El incendio se extendió rápidamente a través del cableado, que no era ignífugo, y afectó a gran parte de la instalación de control del turboalternador, la alimentación eléctrica de potencia y el ordenador central que controlaba el reactor. Fue especialmente importante el hecho de que el calor del incendio rompiera la junta de dilatación de una tubería que llevaba agua para refrigerar el reactor, provocando una inundación en la parte baja del reactor con agua de mar, anegando dos de los cuatro turbosopladores que refrigeraban el reactor.

Falta de agua La falta de agua y la avería de los dos ventiladores en el sistema de refrigeración hicieron que el núcleo se calentara cada vez más, hasta que, pasadas las 4.00 horas, con apoyo de técnicos y bomberos, se logró extinguir el incendio y reactivar manualmente el circuito de refrigeración apagando la central, según los ecologistas.

Sin embargo, “la temperatura del reactor quedó a tres grados de producir una catástrofe”, y según un informe del Consejo de Seguridad Nuclear también se constató que la temperatura de las piscinas de contención y la presión interna del reactor rozaron los máximos admisibles. - Efe