GASTEIZ. La consejera de Salud, Nekane Murga, ha presentado este lunes en Gasteiz esta estrategia integral que tiene un doble objetivo: la detección precoz de las conductas de riesgo suicida para actuar con celeridad y de forma coordinada y la visibilización social del suicidio, "derribando estigmas y tabúes", y cuidando a las personas supervivientes y a sus familias.

El plan contempla 57 medidas a desarrollar en 9 áreas. Así está prevista la creación de un espacio específicamente relacionado con el suicidio dentro del Observatorio de Salud de Euskadi para poner en marcha un sistema de información sobre la conducta suicida y hacer vigilancia; también se instaurará un registro de suicidios y otro de tentativas, con información fiable sobre casos atendidos en los servicios de salud.

Además se quiere elaborar un mapa de suicidios que permita conocer el perfil de métodos empleados y las zonas de alto riesgo o "hotspots", para instalar barreras y otros elementos disuasorios, así como reforzar el control sobre elementos potencialmente letales como fármacos y armas de fuego, e incidir en el fomento de medidas para reducir el consumo de alcohol.

En el Servicio Vasco de Salud se va a crear un "código de riesgo suicida" integrado en la historia clínica electrónica, para posibilitar una mejor identificación y un seguimiento más estrecho del paciente en riesgo.

También se prevé incorporar la perspectiva de la prevención del suicidio en herramientas ya existentes como los teléfonos de ayuda a la infancia y adolescencia, y de atención de mujeres víctimas de violencia machista, entre otros, y se van a llevar a cabo campañas periódicas de sensibilización ciudadana para combatir el estigma.

Además se va a crear un portal web de información, orientación y apoyo en torno a la prevención de la conducta suicida, con especial atención a las redes sociales y se va a elaborar una guía de orientación para los medios de comunicación con el objetivo de generar una nueva cultura social ante este problema.

En definitiva la consejera ha remarcado que se busca visibilizar el problema, combatir tabúes y estigmas, desarrollar la cultura de la prevención, mejorar la atención temprana y la investigación así como el cuidado a los supervivientes.