Bilbao - Alrededor de 60.000 familias podrán reclamar las retenciones de IRPF que les practicaron las haciendas forales sobre las prestaciones que recibieron por maternidad y paternidad. Las tres diputaciones vascas devolverán finalmente los importes que ahora el Tribunal Supremo ha declarado libres de tributación; eso sí, la actuación no será de oficio, por lo que los contribuyentes deberán solicitar expresamente a su hacienda la devolución. Además, únicamente se podrá reclamar el dinero retenido desde 2014, ya que las declaraciones de renta anteriores ya han prescrito, salvo en Araba, donde se devolverá desde un año antes, aunque la OCU ya anunció que las recurrirá en Bizkaia al considerarlas “enriquecimiento injusto”. UGT calcula que el importe que deberán devolver las haciendas será de unos 69 millones de euros.
A principios de este mes, el Tribunal Supremo declaró exentas del pago de IRPF las prestaciones por la baja de maternidad de 16 semanas percibidas de la Seguridad Social, obligando a la Agencia Tributaria a reintegrar las retenciones aplicadas. El fallo afecta a 1,2 millones de personas en todo el Estado, a las que se les retuvo 1.300 millones de euros que ahora Hacienda tendrá que devolver.
En el caso de Euskadi, según los cálculos de los sindicatos, la medida afectará a las 58.860 familias que han percibido estas prestaciones desde 2014, 55.969 solicitadas por madres y 2.891 por los padres. La cifra sería ligeramente superior, ya que en el caso de Araba, también podrán pedir la devolución las familias que recibieron estos pagos en 2013. Aunque es difícil de calcular, ya que las retenciones varían en función de los ingresos de cada contribuyente, las haciendas podrían tener que hacer frente a la devolución de unos 69 millones de euros. Según explica la OCU con un ejemplo, para una prestación de 5.681 euros en 2015, la devolución oscilaría entre 1.000 y 2.600 euros.
Aunque consideran que la sentencia no afecta directamente a las normativas fiscales vascas, las tres diputaciones han decidido mover ficha y devolver lo tributado por los contribuyentes desde 2014 en el caso de Bizkaia y Gipuzkoa, y 2013, en el de Araba, ya que las declaraciones de renta anteriores ya han adquirido firmeza. Eso sí, en los dos primeros territorios tendrán que ser las familias las que lo reclamen, ya que únicamente la institución foral de Araba actuará de oficio. Para ello, deberán rellenar el formulario que cada hacienda pondrá a su disposición en breve. Las retenciones realizadas sobre las prestaciones abonadas en 2018 se devolverán en la próxima campaña de renta, entre mayo y junio de 2019.
Además, las haciendas van a solicitar a la Seguridad Social que desde este mismo mes deje de aplicar las retenciones en los supuestos de permisos por maternidad y paternidad. Y, de cara al próximo año, la Diputación de Bizkaia modificará su normativa de IRPF para especificar que estas prestaciones están exentas del pago de este impuesto, incorporándolo al proyecto de presupuestos que entrará en vigor el 1 de enero de 2019. Por su parte, Araba y Gipuzkoa no lo ven necesario, al menos por ahora.
El delegado de la OCU en Euskadi, Kepa Loizaga, celebró ayer “enérgicamente” el paso dado por las diputaciones, “pues se trata de una petición que la OCU lleva haciendo desde hace años y que ahora finalmente se ha conseguido para todos”. Por ello, desde la organización de consumidores animan a todas las familias a reclamar lo retenido, bien a través del modelo específico para realizar estas devoluciones, bien a través de la OCU. Además, la organización anunció que va a estudiar la viabilidad de reclamar “por enriquecimiento injusto” aquellas prestaciones que se recibieron también entre 2007 y 2013.
“rehacer la declaración” Loizaga advirtió, sin embargo, de que las Haciendas “no devolverán de forma íntegra” las cantidades retenidas. “Hay que rehacer la declaración sin tener en cuenta ese ingreso, el importe de la prestación por maternidad o paternidad. La diferencia entre la declaración presentada y la que resulta tras restar de la base imponible la prestación, es la cantidad que la Hacienda se ha quedado indebidamente y, por tanto, ahora tiene que devolver”.
También los sindicatos se felicitaron de la decisión adoptada por las instituciones forales. Raúl Arza, secretario general de UGT-Euskadi criticó que “algunas diputaciones hayan estado hasta ahora negando esta cuestión, cuando sabían que iban a tener que devolver el IRPF por maternidad de estos últimos cuatro años, ya que las normas forales que regulan el IRPF en el País Vasco son copia literal de la norma estatal que el Tribunal Supremo ha tirado abajo con su sentencia”. Arza recordó que el sindicato lleva reclamando estas devoluciones desde 2016, con la primera sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, manteniendo que “dicha devolución tiene que ser de oficio y no obligar a las madres y padres afectados a una odisea administrativa y judicial”.
También para Comisiones Obreras Euskadi se trata de una decisión “coherente”, en la palabras de su responsable de Acción Sindical, Garbiñe Espejo, “ya que no se va a generar una situación de desigualdad con el criterio que ha adoptado la Hacienda estatal. Además, va a evitar una lluvia de demandas y judicializaciones, con la ciudadanía como principal víctima”. Espejo lamentó que la decisión se haya tomado una semana más tarde que a nivel estatal, “lo que ha generado preocupación entre las familias”.
Finalmente, la Federación de Familias Numerosas de Euskadi, Hirukide, agradeció la decisión. “Queremos agradecer que se haya tomado la decisión en menos de quince días y sin esperar a que aumentase la presión social”, señaló su directora, Natalia Diez-Caballeros.
