BILBAO. Más de 48.000 personas se encuentran afectadas por la fibromialgia en Euskadi, lo que supone un 2,3% de la población. Esta enfermedad tiene un "claro predominio" entre las mujeres, que constituyen el 85% de los casos.
La fibromialgia es una enfermedad crónica que se caracteriza por dolores musculares generalizados de más de tres meses de duración, que se distribuyen por todo el cuerpo.
Afecta a las esferas biológica, psicológica y social del paciente y resulta, en la actualidad, "un importante problema de salud por su prevalencia y morbilidad", según la psicóloga de la Unidad de Dolor Crónico y Fibromialgia de IMQ AMSA Josune Martín.
Con motivo de la celebración, este 12 de mayo, del Día Mundial de la Fibromialgia, Josune Martín ha explicado que esta patología aparece, habitualmente, entre los 30 y 50 años.
Además del "dolor difuso y de la fatiga", síntomas centrales en los pacientes, la fibromialgia se asocia también con otro tipo de sintomatología.
"Se produce un sueño no reparador, fatiga, cefalea, hormigueo en manos y pies, cansancio, sensación de inflamación en las articulaciones, dificultad para recordar palabras y nombres, intolerancia al frío, colon irritable, sensibilidad a los cambios de temperatura o alteraciones psicológicas como sintomatología ansiosa y depresiva", ha afirmado Martín.
La psicóloga afirma que, en la actualidad, "no se conoce la causa de esta enfermedad ni existe un tratamiento eficaz para ella" por lo que "toda esta sintomatología puede provocar efectos realmente devastadores tanto a nivel psicológico como profesional, social e incluso familiar".
"Se caracteriza por la ambigüedad en el diagnóstico, la incertidumbre en la comprensión de su fisiopatología y las dificultades de los médicos para abordarla globalmente", ha añadido.
Según ha advertido, para la familia puede resultar "muy estresante" ver cómo su pariente "sufre sin poder hacer nada" por lo que considera que "también es necesario explicarle lo que es y supone esta enfermedad".