Bilbao - El diagnóstico general es bueno pero cuando se analiza la radiografía al detalle parece manifiestamente mejorable. La percepción de la población vasca sobre su salud es positiva y ha mejorado en el último quinquenio. No obstante un 16% de los hombres y un 21% de las mujeres valora su salud como regular o mala. Además, pasamos más por el quirófano -en 2017 Osakidetza batía récords con 127.096 intervenciones quirúrgicas programadas, 4.305 más que en 2016-, cada vez se opera a gente de más edad -más de 11.000 pacientes tenían el año pasado más de 85 años- y cada vez se acude a Urgencias por cuestiones más banales -600.000 visitas leves o muy leves el pasado ejercicio-. Pero ¿qué dolencias son las más comunes?, ¿qué patologías nos llevan con más frecuencia al hospital? y ¿cuáles nos retienen durante un mayor número de días?
Según la Encuesta de Salud de 2013, ESCAV, la última con datos en vigor, en torno a 224.000 personas, el 10% de la población vasca, son grandes frecuentadores del sistema sanitario, es decir, acuden a su ambulatorio diez veces o más al año. Por contra, casi la quinta parte no realizó ninguna consulta médica en el último año registrado, aproximadamente la tercera parte de la población visitó a su médico uno o dos veces al año y otro tercio consultó entre tres y nueve veces.
Los niños visitan al facultativo mayoritariamente por problemas respiratorios pero en los adultos son las mujeres las que presentan más problemas, y en los primeros puestos del ranking de dolencias figuran enfermedades crónicas como son la hipertensión arterial o la diabetes. También encabezan la lista los problemas músculo-esqueléticos, entre ellos los síndromes de la columna vertebral, la artrosis o las bursitis y tendinitis.
En la otra cara de la moneda, la de las dolencias más graves que nos llevan al hospital aparecen, por grandes grupos diagnósticos, las enfermedades del aparato circulatorio, las enfermedades del aparato digestivo y del aparato respiratorio, que son las que provocan el mayor número de ingresos en hombres. Concretamente la insuficiencia cardiaca, la bronquitis crónica y la hernia inguinal, según confirman los datos del Eustat.
Por el contrario, en el caso de las mujeres, el mayor número de hospitalizaciones está motivado por todo lo referido a la atención del embarazo, parto y puerperio, así como los cálculos en la vesícula biliar, la insuficiencia cardiaca y la patología del aparato respiratorio, donde destaca, sobre todo, la neumonía. Entre los hombres, las tres principales causas de ingreso en el hospital coinciden con las de las mujeres, si bien, dentro de las enfermedades del aparato digestivo, hay que destacar la hernia inguinal como la más habitual.
Retrato robot por edades Las grandes diferencias en el retrato robot de las enfermedades aparecen, de nuevo, cuando se diseccionan los grupos de edad. Hasta los catorce años, las enfermedades respiratorias y de origen perinatal son las más comunes; entre 15 y 44 años los ingresos ligados al embarazo, parto y puerperio representan el 37% y conforme avanza la edad predominan otras patologías: las digestivas y los tumores, en el grupo de 45-64 años, y las circulatorias, entre las personas de 65 y más años.
Excepto en los tumores, por la incidencia del cáncer de mama en las mujeres, la edad promedio de hospitalización de los hombres suele ser más temprana que en las féminas y la mayor diferencia a menudo se localiza en las hospitalizaciones debidas a traumatismos y lesiones (53 años, frente a los 66 de las mujeres).
Las mesas de operaciones tienen también una actividad creciente. Y cada año sube el número de personas que son intervenidas por encima de 65 años (representan prácticamente la mitad de todas las cirugías) y por encima de 85 años, ya que el año pasado fueron operados más de 11.000 mayores que superaban esa edad. Y es que el envejecimiento de la población y las mejoras en las técnicas quirúrgicas y anestésicas provocan que cada vez los quirófanos estén más poblados de seniors. No en vano, el número de pacientes con patologías crónicas aumenta progresivamente a la vez que aumenta la complejidad de los procesos. El 38% de la población vasca de 65 o más años presenta alguna enfermedad crónica. Entre las patologías más prevalentes figuran la hipertensión arterial, seguida por la ansiedad y el estrés, la diabetes, o los problemas articulares.
Osakidetza continúa potenciando las denominadas alternativas a la hospitalización tradicional. Así, la modalidad de cirugía ambulatoria, en la que se atienden procesos que se resuelven en el mismo día del ingreso, va sustituyendo paulatinamente a los ingresos convencionales, y ya alcanza al 60% de toda la cirugía mayor programada con las cataratas y enfermedades del ojo como patologías estrella.
causas de baja laboral Con el panorama de dolencias perfectamente definido, las tres principales causas de baja laboral prolongada son los trastornos lumbares, la patología psiquiátrica y el cáncer de mama. El doctor José Manuel Vicente Pardo, presidente de la Asociación Profesional de Médicos Evaluadores Seguridad Social, aseguró en la XLIII Semana de Humanidades de la Academia de Ciencias Médicas de Bilbao, que entre las enfermedades que causan incapacidades médicas largas, “destacan las dolencias lumbares, solas o asociadas a otras patologías; los procesos psíquicos adaptativos como ansiedad, estrés, o depresión, solos o junto a otras patologías; y el cáncer de mama, derivado de sus peculiares pautas terapéuticas como son la reconstrucción anatómica y la reconstrucción psicológica”.
El experto cree que el número de bajas “se está incrementado entorno al 23% y el gasto, en torno al 15%”. Vicente aclara, asimismo, que “estas incapacidades médicas suponen ante todo, elevados costes en capital humano y costes en capital salud del trabajador, de difícil cuantificación y graves consecuencias”.